De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- La obligada apertura de la controversial obra del paso a desnivel ubicada en las inmediaciones de la colonia Pino Suárez trajo consigo la incomodidad de otro sector de la población, y es que algunos vecinos aseguran que estas acciones fueron orquestadas por personas ajenas y que perseguían otros intereses, principalmente el de lograr la invalidación de la obra para cubrir el cúmulo de corruptelas y desvíos económicos realizados por la pasada administración y que ascienden a más de 30 millones de pesos; con esto fácilmente podrían “lavarse las manos” ante una auditoría.
Publicaciones en redes sociales daban a conocer la otra cara de la moneda: usuarios externaron la urgencia por conocer quién se hará responsable en caso de suscitarse alguna desgracia derivada del mal estado de la edificación, así como de su aventurada y forzada inauguración.
Personas plenamente identificadas como “gente cercana” a la pasada administración, abrieron el paso a desnivel aún antes de que autoridades municipales arribaran al lugar para entablar el diálogo: “el Presidente (Juan Martínez) nos instruyó para que pudiéramos platicar con las personas que estaban liderando esto, pero desafortunadamente nos citaron a las cinco cuando ya habían abierto”, declaró en entrevista la regidora tercera Georgina Aguilar.
La edil, subrayó que el factor principal para no permitir el acceso a los conductores era brindarle seguridad a la población, ya que luego de la realización de una auditoría técnica los resultados arrojaron que las condiciones de la obra son precarias, además de haberse encontrado un desfalco de más de 30 millones de pesos y no haber sido entregada formalmente al Ayuntamiento.
“El hecho de que la ciudadanía sea quien se encargue de abrir el paso tendrá como consecuencia una invalidación de la garantía por parte de la empresa civil a cargo, es decir, la gente está ayudando a que los responsables carezcan de responsabilidad ante los defectos que pudieran presentarse”, dijo la edil.
