Unos 800 migrantes que intentaban continuar su viaje hacia el norte fueron interceptados por las autoridades mexicanas la madrugada del viernes después de que salieron de la ciudad sureña de Tapachula, Chiapas, en horas de la noche.
Los extranjeros, incluidos centroamericanos, venezolanos, haitianos y otras nacionalidades, partieron luego de protestar contra el Instituto Nacional de Migración de México y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, al denunciar que estos organismos retrasan sus trámites de regularización. Los migrantes exigen que los dejen transitar por el país al señalar que buscan una vida mejor y huir de la inseguridad.