Orizaba, Ver.- Una vez más, personal del Hospital Regional de Río Blanco se ve involucrado en un caso de negligencia médica, que generó que una persona mayor se encuentre en estado vegetativo debido a que no fue atendido oportunamente en este nosocomio.
Familiares de Miguel Constantino Cervantes dieron a conocer que a esta persona se le diagnosticó trauma cerebral por una caída, pero en ese momento todavía presentaba reflejos y signos vitales positivos, y a mucha insistencia de sus consanguíneos lograron que lo programaran para cirugía.
Omar Santiago López, familiar del paciente, explicó que fue encontrado tirado en el suelo el pasado 21 de mayo a las 8 de la mañana, lo ingresaron al Hospital Regional de Río Blanco y tras 5 horas le tomaron una radiografía, misma que fue valorada después de 11 horas y ningún médico le proporcionó un diagnóstico, por lo que se vieron en la necesidad de buscar a tres especialistas externos.
Indicó que personal del hospital le comentó que no cuentan con los aparatos necesarios y buscaron la forma de canalizarlo a un sanatorio particular para tomarle una tomografía, pero tampoco fue trasladado de Río Blanco por carecer de ambulancias.
El familiar comentó que el paciente fue rasurado y preparado, sin embargo nunca fue ingresado a quirófano, pues según los comentarios del personal y por instrucciones de la dirección del nosocomio, había otras prioridades como atender a mujeres embarazadas.
Esto provocó que las condiciones de salud de la persona se agravara y ya no pudo ser intervenido quirúrgicamente por los riesgos que corre, e incluso, sólo está bajo suero pues su cuerpo no responde y se encuentra en estado vegetativo.
Santiago López dijo que a nombre de toda la familia se exigirá justicia, pues consideran que se trata de un atentado en contra de la vida de una persona olvidándose de su ética profesional por lo que “yo responsabilizo al hospital completamente” dijo, por lo que se levantarán las denuncias ante las instancias correspondientes, como en la Comisión de los Derechos Humanos y de Arbitraje Médico.
Manuela V. Carmona
colaboraciÛn