Parece fácil tomar partido por las políticas liberales encaminadas a -dicen- recuperar la soberanía del país sobre el control de energía; en especial, el punto en debate es la modificación de leyes para reservar el 56% de la materia de trabajo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) al Estado, dejando para la inversión privada el 44%.
#AcáMandaElUsurero. Para tal, deben finiquitarse las condiciones leoninas impuestas por los neoliberales a favor de los usureros financieros, o sea de ellos mismos, mediante dos artimañas constitucionalizadas por sus lacayos: convertir a CFE en una empresa obligada a sacrificar su propia economía, comprando caros excedentes de electricidad a empresas privadas; los más de las cuáles, solo existen en papeles especulativos.
Según el último reporte hacendario anual, el monto de la estafa cifra 400 mil millones de pesos pasados a los inversionistas. Como siempre, el chico de las mañañeras echa la culpa del estropicio “a los corruptos del pasado neoliberal”; resguardando su causa-raíz: el Estado supuestamente soberano nacional, es dominado por la oligarquía financiera.
#LaRobadera. Ni para dónde, ni cómo negar lo evidente: durante la época neoliberal del Sistema Internacional Capitalista (1968-2018), SIC, los políticos de oficio robaron de lo lindo, empeñaron al país y lo desfondaron entregando billones de pesos a la oligarquía prestamista. En pago a sus servicios, políticos muy reconocidos pasaron de pendencieros, a grandes hombres de negocios.
Enormes son las listas aparecidas en pasquines, periódicos, redes sociales, de personajes de la vida nacional pública y privada que, usando variados instrumentos legales e ilegales, acopiaron fortunas traducidas en patrimonio familiar, negocios de servicios y acciones de la federación y/o de fondos de inversión. Muchos siguen su vida profesional integrados a nóminas de corporativos beneficiados.
¿En la cabeza de quién o en la memoria digital de qué institución caben los números, nombres y actos usados para birlar el patrimonio hacendario y personal de millones de compatriotas? En los secretos bancarios, en Hacienda y Gobernación.
Esta información se maneja a cuentagotas politizadas para encausar al caso, a los casos, así como las soluciones propuestas por la servidumbre liberal de la cuarta T, para desviar la atención en nuevos estropicios y sus responsables.
#AtolínDeMembrillo. El sistema político-económico impuesto prefiere echarle la culpa de sus abusos a “sujetos” como Peña Nieto, Calderón, Fox, Zedillo y -en sus extremos- a Salinas. Nunca lo hará a sí mismo, pues la vieja fórmula del ejercicio del poder público, sigue vigente: si a la mitad sexenal del actual presidente su ejercicio te parece malo, consuélate, el siguiente: no será tan peor.
Para acabarla de amlolar, en su mañañera del 14 de octubre nos vuelve a champar lo evidente: durante 2022 la férrea austeridad franciscana impuesta a la burguesía perdedora, a la clase media, y, a los pobres, se mantiene por la fuerza del Congreso de la Unión controlado, más 140 mil guardias nacionales 100% militarizados.
¡Guau…! ¿Desea para sus hijos un puesto seguro bien remunerado y mejor pensionado? Impúlselo por la carrera de leyes, armas y gobernanzas; total: solo se dedicarán a prodigar abrazos, no balazos.
#BuenasMacrocuentas. En un estudio muy interesante elaborado por el FMI, sin pelos en la diestra, reconoce el principal logro de AMLO con sus políticas de 4ªT: controlar al mínimo el aumento de la deuda nacional, pero al costo de la muerte de 400 mil mexicanos y 4 millones de infectados por Covid-19, del abandono de la obra pública y el privilegio pírrico de la generación de petróleo, ah, pero eso sí: cumpliendo con el pago rigurosos de los intereses y el servicio de la deuda.
A la par de reconocerle estos logros, que nada tienen que ver con su botarga de -“primero los pobres”, niega en público, lo que hace en privado, contratar más deuda; por una razón sencilla: la economía del país está amarrada a la economía deficitaria de los EU. Se sabe que cada día aumenta 2 mil 400 millones de pesos por nuevos préstamos, nuevos intereses y pagos de su menaje.
El monto de la deuda cifrado en +- 13 billones de pesos, oscila a la alta y poco a la baja pues, depende de la cotización de dólar y del porcentaje de interés bancario definido, a su vez del grado de confiabilidad en la capacidad de pago, puesta en duda por las calificadoras, habida cuenta de representar el 54% del Producto Interno Bruto.
La deuda nace, crece y no muere debido a los excesos en el gasto público de un sistema hecho para acumular enormes riquezas, refaccionando los negocios comunes del sistema dominante capitalista.
Así mismo, les caen recursos gracias a las políticas de apoyos a fondo perdido, exención de pagos, becas, devolución de impuestos. Por pésimas decisiones ejecutivas de la 4ªT, cobra millones de dólares por demandas perdidas en tribunales nacionales e internacionales. A la mitad del sexenio liberal de López Obrador, insiste en la responsabilidad de los neoliberales, gracias, especialmente a la enorme estela de corrupción trazada en su raudo paso tras riquezas mal habidas.
Para su constante cotidiana movilidad socio económica, la riqueza socialmente creada pero particularmente apropiada, es representada por medios reconocidos internacionalmente: metales preciosos, oro, plata y monedas fuertes, dólar, euro, rublo, sirven de medios de pago para adquirir mercancías que se han de transformar en nuevas mercancías enviadas al mercado, para su realización.
#TiempoDePagarExcesos. Por la centralización financiera de los medios de pago, la producción desmerece y con ello, el poder adquisitivo de las masas, dependiente enfermizamente de la frágil burbuja del dinero fácil recibido de manos del gran siervo de la Nación y sus achichincles.