Seúl.- La presidenta de Corea del Sur prometió el lunes disolver la guardia costera en medio de crecientes críticas por sus fallas en salvar a cientos de pasajeros atrapados el mes pasado en un ferry que se hundía. Los críticos dijeron que la presidenta Park Geun-hye sólo estaba tratando de desviar la atención de su propio mal manejo de uno de los desastres más letales de Corea del Sur en décadas.
Los guardacostas del país son una dependencia no militar que no está a cargo de patrullar la frontera marítima con Corea del Norte una tarea que realiza la marina. Aun así el anuncio de disolver por completo una guardia costera independiente en un país peninsular sorprendió a muchos.
La guardia costera ha sido fustigada por lo que se percibe como una respuesta lenta y poco profesional en los esfuerzos de rescate y búsqueda. El hundimiento del 16 de abril dejó más de 300 muertos.
Park habló en un mensaje televisado a la nación el primero desde el hundimiento. Comenzó con una reverencia muy pronunciada y terminó entre lágrimas dando lectura a los nombres de los pasajeros y los tripulantes que murieron tratando de salvar a otros.
En momentos en que sus índices de aprobación popular caen en picado antes de las elecciones de alcaldes y gobernadores en unas dos semanas, el discurso se enfocó en reconocer la ira generalizada por las fallas del gobierno y en sus próximas medidas.
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