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“No todos somos corruptos y babosos…”

Superiberia

Javier Lozano trae atravesado a su tocayo y correligionario Javier Corral.

No le cabe en la cabeza que el senador de Chihuahua haya culpado al consejero jurídico de la Presidencia, Humberto Castillejos, de incluir el polémico “haber de retiro” para los magistrados del Tribunal Electoral, en el paquete de iniciativas de la reforma político-electoral.

“Me parece de un brutal oportunismo que algunos senadores se llamen a la sorpresa, digan que están indignados. Javier Corral le echa la culpa al consejero jurídico de la Presidencia, como si él hubiera metido mano, lo cual nos hace ver mal a nosotros como legisladores, como si no tuviéramos control de los textos”, nos dijo el polémico senador poblano.

Lozano dejó claro que detesta las generalizaciones que muy a menudo se escuchan sobre los que, como él, se dedican a la política.

“No todos los políticos somos igual de corruptos, de corrientes y de babosos. No nos pueden ver a todos por igual, porque no somos iguales”, aseguró el poblano, uno de los políticos más activos en las redes sociales.

Los “haberes de retiro” de los ministros —malintencionadamente llamados bonos millonarios y vitalicios— son sólo uno los grandes temas que abordamos con Lozano, además de la elección del PAN y las leyes secundarias de la Reforma en Telecomunicaciones, que ocuparon parte del programa. 

•   Lo que sí comienza a quedar claro es que nunca se planteó en el dictamen darles una “pensión vitalicia” a los magistrados del Tribunal Electoral.

Lo que se aprobó en el Congreso es que será la Comisión de Administración del Tribunal la que determine cuáles van a ser los “haberes de retiro” que beneficiarían a los magistrados que integran la Sala Superior de ese órgano jurisdiccional.

El “haber de retiro” está previsto, ante la disposición legal que prohíbe a los exintegrantes de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, desempeñar cualquier actividad relacionada con su profesión en un periodo de dos años.

•  Hoy domingo son las elecciones en el PAN. Llega a su fin la corta gestión de Cecilia Romero como presidenta nacional de ese partido. Lo destacamos porque es la primera mujer que llega a ese cargo en el conservador partido.

Ya prepara un libro sobre su experiencia como jefa nacional del PAN. El título que le piensa poner refleja la intensidad de lo que vivió: Tres años en tres meses.

Fueron 90 días de intensos jaloneos originados por el proceso interno para renovar la dirigencia; de búsqueda de consensos dentro y fuera del partido; de reuniones con representantes del gobierno y jefes de los otros partidos, de dar seguimiento a las leyes secundarias.

Las leyes de la reforma político-electoral constituyeron la principal preocupación de Romero. Nos lo confiesa en breve charla.

La polarización interna dificultaba el consenso. Los azules se pararon de la mesa de negociaciones más de una vez. Pretextos no les faltaron para poner en riesgo la reforma que ellos, los panistas, habían colocado como condición para aprobar la de telecomunicaciones y la energética.

“Pudo no haber habido reforma y eso hubiese gravitado negativamente sobre el partido”, admitió Romero.

•  La mujer descarta que su mandato pudiese prolongarse más allá del 30 de mayo próximo.

Hay tres escenarios posibles.

El primero es el ideal, pero no el más factible, a juzgar por el polarizado ambiente al interior del PAN: el perdedor levanta la mano al ganador el mismo día de la elección: 18 de mayo. No hay protestas, no hay inconformidad con el resultado. Sería innecesario esperar los cinco días que marca el reglamento de elecciones. El lunes próximo habría jefe nacional del PAN.

El segundo es probable. El perdedor no reconoce de inmediato su derrota. Amenaza con impugnar, pero en la negociación cede. El reglamento interno otorga cinco días para presentar inconformidades. Si pasado ese lapso no se inconforma oficialmente el derrotado, el 23 de mayo habría nuevo presidente nacional.

Tercer escenario. El perdedor impugna. Las negociaciones no dan frutos. Una Comisión interna se encarga de las pruebas presentadas. Tiene hasta el 30 de mayo para resolver la impugnación. Declara triunfador. Al día siguiente asume el nuevo presidente.

Hasta allí llegaría Cecilia Romero. El perdedor puede poner una queja ante el Tribunal Electoral. De todas maneras asumiría el 31 de mayo el nuevo jefe nacional. El tiempo que se lleven los magistrados en dar el fallo final, quedaría en funciones el ganador oficial.

“No descarto el final feliz”, recalcó Cecilia.

Una última recomendación. Sea cual fuere el resultado, los panistas tienen que revisar el método de elección de sus dirigencias. El costo de una elección abierta a los militantes fue muy alto. La división costosa. La imagen del partido anda por los suelos.

Resume la presidenta interina: “El PAN no se va a acabar. Va a aprender de esto. La próxima dirigencia tendrá que revisar el método de elección de los dirigentes”, subraya.

Antes de cambiar de tema les diremos que Madero parte como favorito, pero no se descarta “la chica”.

•  Vaya petardo del Instituto Mexicano para la Competitividad. La SEP desbarató, caso por caso, el tema de los salarios estratosféricos que dio a conocer el Imco.

El subsecretario de Planeación y Políticas Educativas, Enrique del Val, habló incluso de “falta de rigor” en la investigación de ese instituto privado, cuyos escandalosos, pero falsos resultados fueron ampliamente divulgados por los medios de comunicación.

La vocera del Imco, Alejandra Zapata, dice que la maestra María del Carmen Peralta Flores gana mensualmente 576 mil 229 pesos. Error: fue separada de su cargo desde el 1 de mayo de 2010. Demandó y ganó.

Se ordenó su reinstalación y el pago de salarios caídos: un millón 495 pesos. Hay pago parcial de 678 mil pesos y otros dos para cumplir la sentencia del juez.

Tampoco Adolfo Zenteno Ramírez, profesor oaxaqueño, gana 600 mil pesos mensuales. Su salario es de 45 mil; en Hidalgo no hay maestros centenarios que cobren por trabajo devengado ni en Iguala hay una escuela donde sólo trabajan seis personas y únicamente hay un alumno.

La escuela Bandera Nacional de esa localidad guerrerense tiene sólo dos trabajadores y varios alumnos. El costo de la plantilla es de 23 mil 217 pesos mensuales, como consta en documentos oficiales.

En la SEP existe la percepción de que el buscapiés de los salarios estratosféricos es una cortina de humo para opacar lo que sí es un alcance mayor: el convenio que elimina la doble negociación salarial con los maestros del SNTE.

•  Moraleja de la semana (cortesía de Buda, fundador del budismo ): “Para enseñar a los demás, primero haz de hacer algo muy duro: haz de enderezarte a ti mismo”.

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