Córdoba.- El Ayuntamiento se deslinda de su responsabilidad de apoyar a quienes viven en zonas de alto riesgo, sin embargo, los lugareños han aseguraron que en ningún momento personal de Protección Civil acudió a realizar un dictamen de análisis sobre riesgos en la zona.
En principio, en el primer párrafo, la autoridad municipal está violentando Ley número 856 de Protección Civil y la Reducción del Riesgo de Desastres para el Estado de Veracruz, que en su artículo 87, establece que “La Secretaría (de Protección Civil) y las Secretarías de Desarrollo Social y de Medio Ambiente del Gobierno del Estado, con base en estudios de riesgo y de acuerdo a las disposiciones de esta Ley y de la Ley de Desarrollo Urbano, Ordenamiento Territorial y Vivienda para el Estado y demás legislación aplicable, determinarán las zonas de riesgo y las registrarán en el Atlas de Riesgos”.
La determinación de zonas de riesgo tiene por objeto delimitar geográficamente aquellas áreas que por sus características geológicas e hidrológicas, o por su actividad industrial, representan un peligro para la vida humana o la integridad física y patrimonial de las personas.
Los efectos de la determinación de las zonas de riesgo cesarán cuando desaparezcan o sean mitigadas las causas y, en consecuencia, los riesgos potenciales que les dieron origen.
Además, el texto final básicamente es un deslinde de responsabilidades para el Ayuntamiento, lo cual contraviene a la misma Ley 856, en su artículo 109, que dice: “En caso de riesgo inminente de daño o desastre, sin perjuicio de la emisión de una Declaratoria de Emergencia o Desastre natural y de lo que establezcan otras disposiciones legales, las dependencias y entidades de la administración pública estatal y de los municipios ejecutarán las medidas de seguridad que les competan, a fin de proteger la vida de la población y sus bienes, la planta productiva y su entorno, para garantizar el funcionamiento de los servicios estratégicos (…)”.
De esta manera, Ríos Bernal trata de deslindarse de lo que le corresponde para disminuir el riesgo, pues aunque las personas se encuentren asentadas en zonas prohibidas, es su deber apoyarlos en caso de siniestro e inclusive removerlas.
Miguel Ángel Contreras Mauss
El Buen Tono