Dicen que el tiempo todo lo cura, pero también pone todo y a todos en su lugar.
En otras palabras, el tiempo devuelve todo a su justa dimensión, mientras es factor determinante, tanto en los grandes logros, como en los grandes fracasos.
El factor tiempo
Aperitivo: Michoacán
Mientras leen esta columna, se cumple la fecha de tolerancia que el gobierno federal dio a las autodefensas para desmovilizarse y convertirse en fuerza legal. El mero día de las madres, para que no haya desmadres.
Más que en muchos asuntos de Estado, en Michoacán, el tiempo es absolutamente clave. Ciertamente el actuar del gobierno federal en la zona ha sido, por momentos, esquizofrénico. No obstante, en este momento conviene acercar la lupa para observar detenidamente dos potenciales escenarios que son determinados por los tiempos. El primero dibuja un gobierno errático. Aceptando que es necesario que se legalicen en algún punto, este sector de opinión observa como un haraquiri el que se haya detenido el avance con los comunitarios. ¿Por qué razón? Porque todavía se encuentra vivo y actuante La Tuta por lo que la desaparición de Los Templarios no es una realidad aún ni lo será hasta neutralizar a La Tuta.De hecho, la cohesión de este grupo criminal dependía del liderazgo de este personaje. Con base en ello, desmovilizar en estos momentos a las autodefensas podría significar un riesgo para la vida de muchos de ellos. Si esto sucede, se le podría pudrir la estrategia a Alfredo Castillo.
No obstante, desde otra óptica, es justamente el factor tiempo el que precipitó la disolución de las autodefensas . Si ya de por sí fue un riesgo importante avanzar con grupos armados por encima de la ley, en las últimas semanas la ruptura entre los grupos que lo componen era ya evidente. De no haber actuado a tiempo y comenzar a acotarlos, desarmarlos y reencauzarlos al redil legal, la cosa se podría haber complicado. Incluso ya no se sabía quién era el bueno, el malo y el feo. Si se dejaba subir el encono de los grupos comunitarios, podría derivar en enfrentamientos mayores entre ellos, lo que sería desastroso.
Incluso esta misma semana se desconoció a uno de los fundadores, el doctor Mireles, como portavoz del consejo de autodefensas, enfrentado por otro de los fundadores, Papá Pitufo. Mireles ya se había dado el lujo de realizar su gira por el DF, para sumar apoyos para su causa. Además, los enfrentamientos entre las autodefensas, el momento podría espolear, tanto a Los Templarios que podrían ver la ocasión de tomar un segundo aire y emerger como una Familia Michoacana-Templaria de tercera generación, o bien por sus adversarios que en medio de la confusión podrían arrebatar posiciones a la fuerza. ¿Con qué escenario se quedan ustedes? Ambos tienen una lógica similar: las autodefensas tarde o temprano se tienen que desmovilizar, so pena que se conviertan en un lastre para el Estado. La duda es ¿cuándo? La clave es: ¿cuándo desmovilizarlos? Independientemente de las opiniones. Sí, el gobierno aprovechó a los grupos comunitarios para avanzar en su momento, los convierte en una policía legal rural, los controla, les permite portar armas legales y seguir defendiéndose. Paralelamente, serviría de base para la estrategia de recuperación de Tamaulipas, sin quedar en el desabasto federal, ya que el propio Estado no tiene la capacidad de intervenir al mismo tiempo en las 31 entidades federativas, lo que le permitiría desahogar fuerzas federales de Michoacán a Tamaulipas, hoy en situación crítica. Pero si sale mal, si hay mal cálculo de tiempo, por las mismas razones podría resultar desastroso. Y el talón de Aquiles de cualquier escenario se llama “gobierno estatal”. ¿No se hará nada con un gobierno que se ha demostrado penetrado e inoperante?
El factor tiempo.
Aperitivo: Reforma Política
Damas y caballeros, el tiempo es impecable y en el caso de la reforma político-electoral, se nos está quemando el pavo, al no salir del horno las leyes secundarias que la instrumenten. Y es que estamos ya al cuarto para las 12. El mismo presidente del flamante INE, Lorenzo Córdova, lanzó la señal de alerta y advirtió que, entre menos tiempo tengan, “más complicado será llevar a buen puerto las elecciones”. Y tiene razón. Aunque de no darse a tiempo las leyes secundarias, las elecciones de 2015 se desarrollarían bajo el actual Cofipe y las legislaciones vigentes en los estados, la realidad es que la reforma haría agua. Las recién estrenadas autoridades electorales no podrían operar la facultad de atracción ni podrían elegir consejeros estatales, lo que daría al traste con el espíritu de la reforma de quitar influencias indebidas en los procesos estatales de los gobernadores. Tampoco podrían aplicar el nuevo modelo de fiscalización, diseñado para evitar abusos, o bien resultaría imposible instrumentar las candidaturas independientes, lo que consolidaría el absoluto monopolio y protagonismo de los partidos, en detrimento de los ciudadanos.
Ya saben, el factor tiempo.
Dolce: Brasil
Lo que está resultando en un serio problema de tiempo para Brasil es la manía de realizar en su territorio los más relevantes eventos deportivos. Faltan un escaso mes para la justa mundialista y le acaba de estallar una huelga de policías a la presidenta Dilma Rousseff. Aunado a ello, la inseguridad no cesa. Agréguele también la desorganización y la falta de recursos, frente a un evento de semejante catadura económica y financiera. Y si esto no es suficiente, basta recordar que en dos años le tocará, también a Brasil, organizar unos… ¡Juegos Olímpicos!
¿No le estarán zumbando los oídos al expresidente Lula, orquestador de las sedes internacionales de Brasil, por las mentadas que en su honor, salen del Palacio de Planalto?
Café descafeinado, para aminorar la ansiedad carioca.
Impecable, el factor tiempo.