AGENCIA
LOS ÁNGELES.- A más de 15 meses de que se declaró como pandemia el brote de Covid-19, este virus sigue complicando el mundo del deporte, ya que debido a un brote de Coronavirus la esperada tercera pelea entre Tyson Fury y Deontay Wilder podría estar en peligro.
De acuerdo con información publicada por ESPN, en el campamento de ‘Gipsy King’ surgió un brote de SARS-CoV-2, lo cual afectaría el combate que está programado para el próximo sábado 24 de julio en Las Vegas, Nevada.
Aunque aún no hay un pronunciamiento oficial, en el caso de que se confirme el brote de Covid-19 en el grupo de trabajo del boxeador británico, esto afectaría la preparación del pugilista, por lo que la pelea podría ser reprogramada hasta septiembre.
“Continuamos monitoreando el estado de salud de Tyson y su equipo y el estado del evento no ha cambiado de fecha”, comentó la promotora Top Rank al medio antes mencionado.
Fue en 2018 cuando se realizó la primera pelea entre Fury y Wilder, misma que terminó con un empate. La revancha se dio 14 meses después, cuando en febrero del 2020 los dos boxeadores se volvieron a ver las caras arriba de un ring, en dicha ocasión el británico fue el que salió victorioso.
Cabe recordar que el tercer episodio de esta trilogía ha tenido varias complicaciones, una de ella es que originalmente Fury iba a medirse frente a Anthony Joshua; sin embargo, una decisión judicial le ordenó que realizara la tercera pelea frente a su ya conocido rival estadounidense.
