Los ataques con ransomware como el perpetrado contra la red de oleoductos de Colonial Pipeline, la red más importante de Estados Unidos, y se han incrementado ante el trabajo remoto que han adoptado las compañías en medio de la pandemia por la COVID-19.
“A raíz de la pandemia y el aumento del trabajo remoto en el mundo, las empresas se vieron obligadas a hacer uso de distintas herramientas para permitir que los empleados puedan conectarse remotamente a los sistemas de la compañía. Esto también fue aprovechado por los atacantes (…) datos de ESET demuestran que durante el 2020 los ataques al RDP [Protocolo de escritorio remoto] crecieron 768 por ciento entre el primer y último trimestre de 2020”, alertó Camilo Gutiérrez Amaya, jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica, de acuerdo con un comunicado.