- En Atzacan
- Paramédicos de Protección Civil nada pudieron hacer por Arcadio Silvestre, quien no dejó carta póstuma
- Al acudir a casa de su suegro, Hermelinda Flores lo encontró atado con una cuerda a una de las ventanas
ATZACAN.- Ayer martes, Hermelinda Flores León, arribó al domicilio de su suegro, en la cabecera municipal, para desayunar con él, pero grande fue su sorpresa al encontrarlo sin vida colgado de una
ventana con una cuerda.
A pesar de que solicitó el apoyo de los servicios médicos de Protección Civil municipal, nada se pudo hacer, ya que el hombre tenía varias horas de haber muerto, por lo que se informó a las autoridades ministeriales.
De acuerdo a los primeros reportes, los hechos ocurrieron a las 10:30 horas, cuando la mujer se dirigió a casa del hoy finado, Arcadio Silvestre Vázquez, en calle Norte 6 número 63 de la colonia Centro, para visitarlo.
Pero al entrar a su dormitorio vio que el hombre yacía colgado de una de las ventanas con una cuerda que se ató al cuello, por lo que pidió el auxilio de los cuerpos de emergencia, a la vez que fue a buscar a su suegra.
Pero ya nada se pudo hacer y una vez que fue declarado muerto, los rescatistas dieron aviso a la Comandancia de la Policía Municipal, cuyo personal acudió para entrevistarse con la familia y acordonar el inmueble.
Finalmente, agentes de la Fiscalía Regional y de la dirección de Servicios Periciales, acudieron a la vivienda para realizar el levantamiento del cadáver de Arcadio Silvestre, el cual fue enviado al Semefo de Orizaba para la
necropsia de Ley.
Una vez que se confirmó que se trató de un suicidio, los restos del campesino fueron entregados a su esposa Guillermina Gutiérrez Carrillo, quien reclamó el cuerpo de su esposo para que sea sepultado de
acuerdo a sus creencias.
