Hasta 60 países, incluyendo algunos de los más pobres del mundo, podrían quedarse estancados en la primera dosis de la vacunación contra el coronavirus porque casi todos los envíos del programa global pensado para ayudarles están bloqueados hasta junio.
En la última semana, Covax, la iniciativa global que proporciona vacunas a las naciones que carecen de influencia para negociar la compra de los escasos suministros por sí mismas, mandó más de 25 mil a países de bajos ingresos sólo dos veces en un día determinado. Las entregas están prácticamente suspendidas desde el lunes.
En total, durante los últimos 15 días, según los datos compilados a diario por UNICEF, se autorizó el envío de menos de dos millones de dosis a través de Covax a 92 naciones en desarrollo, la misma cantidad administrada sólo en Gran Bretaña.