- Con protocolos sanitarios
- El sacerdote, Óscar Fabrizio Martínez Limón, llevó el Santísimo en un recorrido por diferentes calles para bendecir a los fieles.
Omealca.- Ante la pandemia que sigue cobrando vidas en el planeta, sacerdotes acercaron a la feligresía la celebración del Viernes Santo y con ello recordaron la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
Los eventos religiosos se llevaron a cabo con los protocolos de seguridad y sanidad ordenados por la Secretaría de Salud, a fin de prevenir contagios de Coronavirus, por ello las homilías se hicieron en la parroquia con un 60 por ciento de asistencia después de pasar filtros sanitarios como prevención.
El jueves Santo, la parroquia de San José realizó un recorrido del Santísimo por gran parte del municipio, con el objetivo de que los católicos recibieran la bendición.
El sacedote del lugar, Óscar Fabrizio Martínez Limón, explicó el significado del Triduo Pascual, que es el período de tiempo en el que se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret y constituye el momento central de la Semana Santa y del año litúrgico.
El jueves Santo se recuerda la Última Cena del Hijo de Dios, la institución de la Eucaristía, del Orden Sacerdotal y el mandamiento del amor, es tiempo de Cuaresma e inicio de la Pascua.
El Viernes Santo es de meditación sobre la Pasión del Señor.
El párroco destacó que en comparación con otros años y debido a la emergencia sanitaria, ordenó que la procesión con el Santísimo se extendiera a las calles de Omealca. “llegó a las orillas de las casas de la feligresía”.
Destacó que por la pandemia se tuvieron muchas limitantes para que no hubiera aglomeraciones y riesgos.
El objetivo de la Iglesia fue darle a los católicos la cercanía de Jesús sacramentado, “sólo fue el Santísimo, pero sin procesión y sin personas”.
