Por Andrés Timoteo / Columnista
LUNES, LA UNGIDORA
Para los creyentes -y para los que no lo son- inició la Semana Santa, la segunda de la pandemia de Coronavirus y restringida en actividades de culto y ocio. Es decir, las procesiones, misas y demás rituales religiosos están suspendidos, en el mejor de los casos, y limitados en aforo, en el más aceptable. La semana es, por supuesto, de asueto y diversión, aunque muchos de los destinos vacacionales están cerrados. Bueno, en México no.
En el tema bíblico, hay un punto que se acopla y desafina a la vez con el actual escenario feminista ya que luego de que las extremistas han cargado contra el lenguaje, las caricaturas, los escritores, los políticos y los monumentos exigiendo defenestraciones ahora van contra el texto de Juan, el evangelista, pues hoy Lunes Santo la lectura está dedicada a María Magdalena, una mujer históricamente humillada.
“Fue Jesús a Betania, donde vivía Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Allí le ofrecieron una cena. Marta servía y María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y costoso, le ungió a Jesús los pies y se los enjugó con su cabellera”, dice el pasaje evangélico. Y ¡pum!, la ira de las feministas ya corre en muchos lugares porque la Magdalena se arrodilla, lava y perfuma los pies del varón y utiliza su cabellera como toalla.
Sí, es la misma mujer bíblica que desde que hace casi mil 500 años fue declarada como “prostituta” de la que habían expulsado siete demonios. Lo decretó el Papa Gregorio Magno en 591 y desde entonces, María Magdalena ha sido zarandeada por la Iglesia Católica. Hoy ese capítulo de la ungidora judía causa prurito en el imaginario feminista. ¿Llamarán a quemar el Evangelio?
En el solario político, otra lectura evangélica de Lunes Santo también provoca escozor porque Mateo relata que Jesús echó a cintarazos a los mercaderes del templo de Jerusalén y los acusó de haberlo convertido en una cueva de ladrones. Nada más al dedillo. Hoy no será un templo, pero sí las instituciones públicas y la representación popular que están convertidas en guaridas de rateros – claro, también buena parte de la Iglesia Católica-. Ese cubil está a disputa, muchos van tras él. Entonces, creyentes o no, nadie puede negar que el relato mateniano es certero y aplicable en estos días.
Por lo pronto, también este Lunes Santo el famoso Ecologista Universal iniciará su viacrucis número 36 desde la Catedral de Xalapa hasta la central nucleoeléctrica de Laguna Verde, en Alto Lucero. Quizás muchos ven a este personaje y su andanza pascual como algo folclórico, pero en realidad es el último reducto de la resistencia contra esa bomba de tiempo que es la planta nuclear.
A finales de los años ochenta cuando estaba en construcción y en los noventa cuando comenzó a operar la planta proliferaron las manifestaciones de repudio. Cada semana en el zócalo xalapeño se apostaban las Madres Veracruzanas contra Laguna Verde o Madres Antinucleares pero el tiempo las cansó y ahora solo queda el Ecologista Universal como pulso de memoria. Más ahora que han trascendido al menos dos incidentes preocupantes al interior de Laguna Verde durante las recargas de uranio enriquecido que obligaron a realizar paros técnicos y que han sido ocultados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) -sí, por Manuel Bartlett-.
Si antes se acusaba a la inexperiencia y la corrupción del régimen priísta que generaban riesgos en Laguna Verde – se habló desde fugas de radiación que contaminaron el sistema lacustre y generaron la proliferación de casos de cáncer en la población aledaña así como mutación en flora y fauna-, ahora con la “cuarta transformación” el problema es el regateo de recursos para su mantenimiento lo que es igual de peligroso. El monstruo radiactivo sigue allí y ahora es más peligroso que antes.
VERDE CRIMINAL
Hablando de cosas verdes, en México cambiaron a ese color el semáforo epidemiológico para que la gente salga en tropel a saturar las playas, centros comerciales, restaurantes, plazas públicas, atrios y demás sitios de recreo. En pocas palabras: que corran a contagiarse a gusto. Esto pese a que ya se rebasaron los 200 mil muertos y los 2.3 millones de infectados, según cifras oficiales. Ninguna de las 32 entidades están en rojo de alerta máxima. Dieciocho fueron colocadas en amarillo, siete en naranja y otras siete en verde, entre ellas Veracruz.
Si el ritmo de contagiados y muertos van en ascenso y México está en el tercer lugar mundial en esas cifras calamitosas, ¿no es una locura poner “en verde” al país y hacer creer a todos que ya no hay peligro? No es una locura sino un crimen de Estado porque la autoridad atenta contra la salud pública. La turbamulta hará la fiesta en las próximas dos semanas y en abril será el ahogo y lo peor es que posiblemente ya estén circulando en el país las variantes del Coronavirus -inglesa o amazónica- con la llegada del turismo extranjero. Entonces, pronto será “el llanto y el rechinar de dientes”, según alertan los científicos aludiendo, paradójicamente, a uno de los textos de Mateo.
Las vacaciones de Semana Santa son parte de la antesala de los comicios intermedios y por eso el gobierno de Andrés Manuel López Obrador antepuso la conveniencia partidista sobre el cuidado de la población. Decretar restricciones sanitarias y hacer llamados de advertencia epidemiológica no es algo popular ni atrae votos. Tampoco cerrar playas, balnearios y otros sitios donde las aglomeraciones son inevitables y que se transformarán en focos de contagio vírico. Así, el manejo perverso de los asuntos sanitarios en México.
En Veracruz solo seis municipios están en semáforo naranja -Xalapa, Veracruz, Jalacingo, Tuxpan, Poza Rica y Juchique de Ferrer -, 123 en verde y 74 en amarillo. En estos últimos, hay 21 municipios ubicados en la zona centro: Córdoba, Orizaba, Fortín de las Flores, Huatusco, Nogales, Ciudad Mendoza, Mariano Escobedo, Amatlán de los Reyes, Coscomatepec, Paso del Macho, Rafael Delgado, Río Blanco, Tehuipango, Ixtaczoquitlán, Atlahuilco, Atoyac, Santa Ana Atzacan, Tlaltetela, Acultzingo, Tezonapa y Omealca. Obvio, en la lógica fomentada por el gobierno, el amarillo y nada es lo mismo. Todos andarán desbocados en estos días santos y pandémicos. Ya vendrán las consecuencias.
JUGADA DE CAPABLANCA
No fue una sorpresa sino el resultado de una jugada de ajedrez, concretamente la conocida como “Capablanca” o de “Sentido Común” que consiste en bloquear y desplazar del tablero al peón que incomoda al Rey o la Reina. Así, en Orizaba, el “Emperador” de la aldea, Juan Manuel Díez Francos, terminó ‘decapitando’ a su archienemigo Fidel Kuri Grajales, quien abandonó la disputa por la candidatura a la alcaldía y emigró al partido Redes Sociales Progresistas (RSP), de la exdirigente magisterial, Elba Esther Gordillo.
La noticia la dio a conocer el fin de semana Fernando González Sánchez, dirigente nacional del mismo y yerno de la Gordillo, en sus redes sociales donde celebró la llegada de Kuri Grajales y también de la exalcaldesa de Xalapa, Elizabeth Morales. Ambos finísimas personas y de una lealtad tan sólida como la mantequilla bajo el Sol canicular. No hay que olvidar que, cuando todavía estaba en su apogeo el duartismo, Kuri renunció al Partido Revolucionario Institucional (PRI), pero el entonces gobernante Javier Duarte lo hizo regresar al ofrecerle el negocio de regentear el equipo de fútbol Tiburones Rojos.
En el 2018 se convirtió al morenismo, aunque ahí le pagaron mal porque el gobierno estatal no rescató el negocio de la franquicia futbolística como esperaba. Al contrario, le quitaron el estadio Luis “Pirata” de la Fuente y otros inmuebles le habían concesionado ilegalmente. Hace apenas unas semanas se inscribió como precandidato a la diputación federal por la alianza PRI-PAN-PRD y pagó gacetillas en la prensa para que dijeran que sería él y no su tocayo, Igor Fidel Rojí, el abanderado, pero fue mera alharaca porque al final se tuvo que ir del partido y el grupo diez-franquista se anotó un triunfo en esa añeja reyerta que tiene con Kuri Grajales.
Ahora solo le falta la última jugada, es decir que hagan Jaque Mate y lo venzan en las elecciones del 6 de junio si RSP lo postula en ese distrito o a la alcaldía. Por cierto, qué le dirán los orizabeños a Kuri cuando vaya a pedirles el voto dado que apenas en el 2017 renegaba de su terruño con el fin de convertirse en candidato ‘cachirulo’ a la alcaldía de Veracruz donde fue derrotado por el panista Fernando Yunes Márquez. Acuérdense que decía que ya no vivía en la Pluviosilla ni quería saber nada de la cruz de su parroquia y que era más jarocho que Paco Píldora. Risas.
En el contexto nacional, la convulsión con la cual terminó la semana pasada e inicia la última de marzo es la cancelación del registro por parte del Instituto Nacional Electoral (INE) de los candidatos de Morena a las gubernaturas de Guerrero y Michoacán, Félix Salgado y Raúl Morón, respectivamente, por no presentar reporte de gastos de precampaña. También invalidó registros de otros 47 candidatos a diputaciones locales y federales así como a alcaldías, todos de Morena y partidos aliados.
Vaya que el INE le hizo un favor al pueblo de Guerrero, a las feministas y en cierto modo a Morena al quitarle de encima o al menos intentarlo -pues seguramente se impugnará el veredicto ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF)- al impresentable Salgado Macedonio. El asunto da para un análisis más minucioso por las consecuencias y los amagos de los afectados que sin duda enrarecerán el ambiente electoral, pero de momento el INE se erigió como un ente justiciero y plausible.
El árbitro electoral también les hizo un favor a los veracruzanos y específicamente a los martinenses porque anuló la postulación de Juan Carlos Torres Ramírez a la diputación federal por Martínez de la Torre. Dicho individuo es todo un catálogo de bellaquerías. Fue funcionario duartista en la Secretaría de Desarrollo Social y estuvo involucrado en el saqueo de recursos. También se le acusó de robarse 28 millones de pesos de una caja de ahorro comunitario, pero saltó a Morena donde le perdonaron todo y hasta catapultaron a una diputación federal. Uff, de lo que se salvaron los limoneros.