- tras superar covid-19
- La pandemia ha dejado al descubierto la vulnerabilidad del ser humano en todos sus aspectos
CDMX.- Tras superar el Covid-19, Alejandro, de 29 años, ha sufrido episodios de depresión, estrés y ansiedad al no “poder quedar bien, me fatigo mucho o me canso muy rápido y tengo mucho sueño”.
Y es que de acuerdo a Elizabet Hervis Aviles, psicóloga especialista en Psicoterapia Humanística Existencial, la pandemia ha dejado al descubierto la vulnerabilidad del ser humano en todos sus aspectos, físico, social y psicológico, en este último las secuelas pueden ir desde ansiedad, depresión, estrés agudo, Toc (Trastorno Obsesivo Compulsivo),
fobias o hipocondrías.
“Las secuelas psicológicas están siendo más evidentes en los diferentes grupos de la población tras tener o incluso al superar el Covid. Las manifestaciones están evidenciando las consecuencias de la misma enfermedad y la situación global en la que nos encontramos”, agregó.
La especialista comentó que la población más vulnerable a presentar secuelas psicológicas son los jóvenes y adultos jóvenes (18-45 años).
“Sin embargo, en el ejercicio clínico ha habido un aumento en la asistencia y atención a los niños por ansiedad, irritabilidad y hasta estrés que están manifestando”, señaló.
Dijo que el abandono y el aislamiento son detonantes que pueden agudizar los síntomas, además de las características inherentes de cada individuo, entre ellos el carácter, personalidad, temperamento, estado físico y emocional.
Para Mariana, de 40 años, el Covid-19 cambió su forma de ver la vida, de ser una persona con “mucha vida y sonriente”, ahora sufre de cambios de estados de ánimo constantemente.
“No quiero sentirme así, pero esta pandemia realmente me ha cambiado, la experiencia de superar el Covid me hizo más fuerte, pero también
menos alegre”, comentó.
Atención psicológica
La psicóloga dijo que aunque se han venido estableciendo programas y protocolos de atención para la población que ha resultado vulnerada mentalmente tras padecer y superar el Covid-19, las medidas de atención son variables.
“Independientemente de seguir las medidas de las autoridades sanitarias, así como de los profesionales de la salud mental, el acompañamiento que se lleva dentro y fuera del entorno familiar, educativo y/o social, estos rubros se deben aplicar y dar seguimiento antes, después y en el inter del proceso”.
“El proporcionar medidas de apoyo y contención pueden ser ejercidas por la misma familia, sin olvidar que el apoyo psicológico será fundamental si los síntomas se agudizan”, agregó.
Otra de las cosas a considerar son las actividades que podrían realizarse, con la finalidad de liberar el estrés acumulado por la pandemia y van desde realizar actividades al aire libre, “ya que este tipo de actividades permite afrontar el confinamiento, ayuda a la recuperación física y mental del individuo”.
Elizabet Hervis Aviles también recomendó hacer yoga, meditación, baile, pintura, canto, etcétera, ya que este tipo de actividades ayuda a romper con el tedio y el estrés acumulado.
En cuanto al tiempo estimado para realizar la rehabilitación mental en pacientes post Covid, la especialista señaló que sería aventurado poner una fecha, ya que la recuperación depende de cada persona y sus redes de apoyo con que cuente.
“En el aspecto psicológico el tiempo podría prolongarse de tres a seis meses y dependerá de las circunstancias y contexto en que se encuentre de manera muy particular, sin olvidar las redes de apoyo (familia, amigos, contexto social)”, explicó.
Sin embargo, también destacó que los pacientes pueden tener recaídas, pero éstas dependerán del abordaje recibido en sus diferentes contextos.
Por ello el tomar conciencia y asumir la responsabilidad de los síntomas que vaya manifestando el sujeto, esa detección que puede ver la familia o uno mismo, se podrá afrontar de la mejor manera la situación que nos aqueja como individuos y sociedad.
“Apoyarse de los protocolos establecidos por las autoridades de la salud tanto física como emocional, facilitará el seguimiento, con un acompañamiento, amoroso y empático para quien lo padece y de no ser así, pues buscar apoyo profesional con las líneas de vida o un profesional de la salud mental directamente”, finalizó.
