- Por Óscar Mario Beteta/ columnista
Históricamente, los mexicanos buscan vengarse de gobernantes que incurrieron en excesos
Justo a siete meses de las elecciones federales de 2021, resurgen con gran fuerza dos temas que podrían ser el factor de mayor impulso para que la mayoría de los candidatos de Morena a gobernadores, diputados federales y locales, alcaldes, se alcen con la victoria el 6 de junio, aún en el contexto de las crisis sanitaria y económica.
El primer gran As, que sin duda el presidente López Obrador administrará oportuna y eficazmente, como suele hacerlo con los asuntos que más le interesan, es la corrupción del sexenio pasado, que hoy coloca a algunos de sus principales actores políticos en perspectiva de ser investigados judicialmente.
Que el ex secretario de Hacienda, Luis Videgaray, se halle ya en perspectiva de una detención por su eventual participación en el caso Odebrecht, es una verdadera mina de oro que será explotada al máximo en las semanas y meses por venir, mirando a las elecciones intermedias.
Y como a ese ex funcionario está y estará inevitablemente vinculado el ex presidente Peña Nieto, los nombres de ambos, manejados convenientemente en vínculo con posibles delitos que a todo mexicano le gustaría que se castigaran, mantendrán interesada y dispuesta a la ciudadanía a revalidar la permanencia de políticos de Morena en el poder y/o a llevarlos a él.
Históricamente, los mexicanos desean y buscan vengarse de los gobernantes que, mientras estuvieron en la cima, incurrieron en abusos y excesos. Casi por regla, pagan con agradecimiento a quien les da esa satisfacción, que esta vez podrían hacer patente en las urnas, lo cual no estaría fuera de cálculo.
De procederse penalmente contra quienes agraviaron a los mexicanos con las faltas que se les formulen, México se sumaría a la larga lista de países que han llevado ante la justicia a sus personajes más encumbrados por haber sido corrompido por la constructora brasileña. Aquí, sólo con eso, el gobierno obtendría un triunfo adentro y afuera, con lo cual reafirmaría su consenso.
La otra carta potencialmente ganadora que tiene ya en sus manos, es la Estafa Maestra, sobre la que el ex hombre de todas las confianzas de Rosario Robles cuando fue titular de Sedesol y de Sedatu, Emilio Zebadúa, se ha manifestado dispuesto a declarar cuanto sabe para alcanzar algún beneficio.
En este asunto, también podrían aparecer Peña Nieto y otros altos funcionarios que serían materia prima de alta calidad político-electoral-mediática susceptible de generar una muy alta rentabilidad a Morena en los comicios, lo que le permitiría hacerse de la mayoría de los miles de puestos que estarán en disputa.
Si bien Morena vivió un largo periodo de dificultades para elegir a su dirigencia, su nuevo líder, Mario Delgado Carrillo, formará, junto con el presidente de la República, la pareja en la que descansarán todas sus expectativas de victoria en los comicios del próximo año. Con la voz de uno y el trabajo del otro, será una máquina imparable en 2021.
Sotto Voce…
El comportamiento de los mercados financieros y bursátiles del mundo, días antes y después de la elección en Estados Unidos, confirman que, gane Biden o Trump, estarán cómodos y anticipan que, aun con la pandemia, pronto llegará el momento de recuperación de la economía mundial. Para México, la sorpresiva revaluación del peso puede convertirse en la base de la confianza que acelere ese proceso, con lo cual el panorama empezaría a ser más claro y tranquilizador…Extraordinaria mancuerna, la que harán la nueva titular de la secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, y el titular del ramo en la Ciudad de México, Omar García Harfuch, quien ha dado excelentes e inéditos resultados en muy poco tiempo, incluso habiendo sido víctima de las atrocidades del crimen organizado. Su experiencia, honestidad y valor, empatará con la lealtad, honradez y eficacia de la ex secretaria de gobierno capitalino.