- Para frenar contagios
- Las regiones pasarán de una fase a otra en función de su riesgo de contagio y lo establecerá el Ministerio de Sanidad.
Roma.- Las autoridades de gobierno italianas decretarán un toque de queda en el país, además cerrarán temporalmente museos, salas recreativas y centros comerciales en días festivos, a fin de frenar los contagios de
COVID-19.
El primer ministro, Giuseppe Conte, habló durante una comparecencia parlamentaria de las medidas que pretende aplicar y que llevará a votación en la Cámara de
Diputados y en el Senado.
La determinación contempla acciones restrictivas para las regiones con mayor nivel de contagio y establecerá tres fases en función del riesgo, después de que algunas, como Lombardía, la más golpeada por la pandemia, acumuló unos 8 mil nuevos casos diarios de
COVID-19.
En todo el país habrá un toque de queda, que comenzará “a última hora de la tarde”, dijo Conte, sin precisar la hora exacta.
La restricción podrá evitarse en casos justificados de tipo laboral, de estudio, salud o por
necesidad.