CDMX.- Manuel “El Loco” Valdés murió la madrugada de este viernes víctima de cáncer a los 89 años de edad, anunció su familia.
Desde 2017, la salud del actor se había deteriorado cuando le fue detectado un tumor en la cabeza, que se le extirpó ese mismo año.
Tres años después de aquel susto, el tumor regresó y le empezó a crecer hacia adentro de la cabeza, lo que en un principio lo hizo imperceptible. “Al crecer hacia adentro le empezó a hacer daños de percepción. De repente veía cosas que no estaban y pensábamos que estaba cotorreando”, comentó su nieto, Iván Valdés, al programa Ventaneando en junio de este año.
Iván detalló que tanto él como su familia notaron que el ánimo del actor estaba viéndose afectado, pues no era el hombre bromista que siempre había sido, incluso con los medios de comunicación, y confesó que, por primera vez, su abuelo tuvo miedo de perder la vida.
“Los doctores nos advertían que podía ser el último tratamiento, por eso yo tenía tanta urgencia de estar en México para su cumpleaños, pero bendito Dios, salió súper bien, se redujo el tumor”, compartió.
En julio de este año el estado de salud de “El Loco” Valdés se complicó aún más, pues según su nieto, empezó a tener problemas de oxigenación, lo que desencadenó otros síntomas.
Una vida “loca”
Fernando Manuel Alfonso Gómez de Valdés y Castillo nació en la Ciudad Juárez, Chihuahua, el 29 de enero de 1931y junto con sus hermanos, Germán Valdés “Tin Tan”, Ramón Valdés (el inolvidable Don Ramón de El chavo del Ocho) y Antonio Valdés, formó una importante dinastía de actores.
Empezó a trabajar en el mundo del espectáculo a los 18 años en la película Calabacitas tiernas, al lado de sus hermanos Germán y Ramón y desde entonces no dejó de trabajar.
Participó en más de 50 películas, entre ellas Bromas, S.A., La pulquería y Dormitorio para señoritas, además de que prestó su voz para las cintas animadas La leyenda de la Nahuala, Buza Caperuza: la verdadera historia, El principito (en la que también prestó su voz Cecilia Suárez) y el clásico infantil Peter Pan: El regreso al país de Nunca Jamás, donde dobló al Capitán Garfio.
En televisión tuvo su época de oro en los años 70, temporada en la que tuvo sus propios shows: Ensalada de Locos, La hora del Loco, Variedades de media Noche y El show del Loco Valdés.
Este último programa (que estuvo al aire de 1972 a 1974) fue muy conocido porque, según la leyenda urbana, por poco y le cuesta la carrera.
En una de las emisiones al “Loco” se le ocurrió referirse a Benito Juárez como “Bomberito Juárez”, lo que ocasionó, dicen, que lo multaran y que su show fuera cancelado; sin embargo, años después su nieto Iván aseguró que sólo recibió un jalón de orejas por parte de la Secretaría de Gobernación.
“Mi abuelo reconoció que había sido una broma ofensiva y recitó en su programa una epístola de Benito Juárez que termina con la frase ‘el respeto al derecho ajeno es la paz’, y ya no pasó a mayores”.
El famoso sobrenombre de “El Loco” nació a raíz de una discusión que tuvo con el productor Luis de Llano Palmer (papá de Julissa y Luis de Llano Macedo) a quien le pidió un aumento de sueldo. La respuesta de don Luis fue: “Está loco, Valdés”, a lo que Manuel respondió con un: “Sí, soy ‘El Loco Valdés’”.
La familia del “Loco”
A nivel personal, “El Loco” Valdés tuvo varias parejas con las que procreó 12 hijos, entre ellos el actor y conductor Marcos Valdés, el cantante Pedro Valdés y Alex “El Pupi” Valdés , fallecido en abril de 2019.
Con Verónica Castro tuvo a Cristian Castro. Durante la infancia y adolescencia del cantante la relación entre ambos era nula. De hecho, se reencontraron y supuestamente hicieron las paces hasta que nació Rafaela, la hija menor del intérprete.
De hecho, el comediante fue invitado al bautizo de la niña (celebrado en 2015) y se hicieron comunes los encuentros entre los tres. Luego de algunos años, sin embargo, la relación se volvió a romper, y según reveló Cristian, nunca volvió a estrecharse.
“Yo no crecí con mi papá penosamente, tristemente. Me da mucho gusto ser el producto de ese romance y la verdad le agradezco tanto a Dios ser hijo de mi papá; sin embargo, lo considero un amigo, un conocido. No lo puedo considerar tanto ese padre porque no lo sentí”, declaró en 2019 al programa Suelta la sopa.
“Estamos bien, ya tuvimos un diálogo, tuvimos experiencias juntos de ir juntos al futbol. No se necesita que estemos pegados, dramatizando, cosa que a él no le gustaría que yo dramatizara”, dijo el cantante.
Sin importar la relación con su descendencia, Iván Valdés aseguró a fines de julio en Ventaneando que “El Loco” Valdés no dejó ninguna herencia, que la casa donde vivió hasta el día de su muerte es propiedad de los hijos que el actor procreó con su última esposa, la actriz Arcelia Larrañaga, fallecida en 2018 y con quien estuvo casado durante más de 50 años.
“Cuando entró al hospital la primera vez me comentó: ‘Si entro al quirófano y ya no salgo, o si salgo loco de verdad, trata de mantener mi imagen lo más bonita, lo más alegre posible… Van a jurar que tengo millones, que la herencia y no se qué… cuando sepan que no tengo un centavo a mi nombre, se van a morir”, dijo Iván quien agregó que el actor nunca dejó de recibir dinero por la exclusividad que tenía con Televisa