LA TERCERA “O”
Para todos aquellos avezados lectores que pidieron continuar el texto “Triple O” que trata las tres empresas –las dos primeras son Oceanografía S. A, ligada a los hijos de Martha Sahagún y la brasileña Odebrecht- que hicieron o siguen haciendo negocios al amparo del poder en Veracruz, ligadas a políticos encumbrados y poco escrupulosos, la tercera firma cuyo nombre comienza con esa letra es Oracle de México S. A. que durante la fidelidad recibió contratos millonarios para manejar todo el sistema informativo del Gobierno del Estado, desde páginas web hasta soporte técnico e incluso programas que costaron carretadas de dinero y no rindieron beneficio alguno para los veracruzanos y se habrían orientado a cometer fraudes electorales.
Como se sabe, Oracle de México es socio estratégico de la firma Hildebrando S. A. propiedad de Diego Hildebrando Zavala Gómez del Campo, hermano de Margarita Zavala que es esposa del ex presidente Felipe Calderón Hinojosa. Para quedar bien con la “familia presidencial” de aquel entonces, el ex gobernante estatal, aquel que no debe ser nombrado, convirtió a Oracle de México S. A. –y por ende a la familia Zavala Gómez del Campo- en el proveedor principal de software y servicios informáticos de la administración veracruzana. Es más, cada vez que un internauta accedía a una página del Gobierno estatal podía identificar el servidor de Oracle de México como responsable de su construcción y mantenimiento.
Habrían sido varios millones de pesos –de los veracruzanos, no suyos- los que el innombrable le dio al cuñado de Calderón Hinojosa, beneficiando a esa firma tramposa que en el 2006 fue acusada de participar en el fraude electoral en las elecciones presidenciales, las cuales ganó el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador pero que le fueron arrebatadas para imponer al panista Felipe Calderón. No hay que olvidar que el Instituto Federal Electoral (IFE) fue acusado de haber estructurado el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) con software vendido por Hildebrando S. A. a través de Oracle de México. En el afán de desmentir los señalamientos, el propio Zavala Gómez del Campo reconoció que tuvo entre sus clientes al IFE y que su firma tenía “relación de socio estratégico” con Oracle”. (http://www.jornada.unam.mx/2006/06/10/index.php?section=politica&article=013n1pol).
El propio López Obrador había acusado en el último debate entre los aspirantes a la presidencia del 2006 que la empresa Hildebrando habría evadido al fisco pese a que tenía ingresos superiores a los 2 mil 500 millones de pesos. Y para tener una idea de cuánto dinero le dio el innombrable a la empresa ligada con el cuñado de Calderón Hinojosa, para que operara el sistema informático de la entidad hay que retomar la declaración hecha en octubre del 2006 por López Obrador cuando reveló que el gobernador priista de Tabasco, Manuel Andrade contrató a Hildebrando S. A. para operar los servicios de informática y cómputo de las secretarías estatales de Desarrollo Social y Protección al Ambiente, con un pago de 1.5 millones de pesos –presumiblemente mensuales-.
¿Cuánto se le dio en Veracruz a Oracle de México? Nadie sabe, nadie supo pero si se hacen cálculos tomando la referencia de Tabasco habrían sido alrededor de 108 millones de pesos en todo el sexenio. La entonces Dirección de Comunicación Social del Gobierno del Estado, en ese entonces a cargo de Alfredo Gándara Andrade, quien después fue presidente municipal de Poza Rica y hoy despacha como diputado local, fue el área que más demandó los servicios de Oracle de México, sobre todo en el diseño y mantenimiento del portal oficial de su oficina así como los enlaces con otras webs de las dependencias estatales.
La segunda dependencia donde Oracle tuvo mayor injerencia fue la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) sobre todo por el uso de sistemas electrónicos de recaudación de impuestos. Precisamente en la misma laboraba el funcionario fidelista que sirvió de enlace para los contratos otorgados a la firma socia de Hildebrando, Juan Antonio Pavón González, entonces director general de Innovación Tecnología y quien actualmente es director general de la oficialista Radio Televisión de Veracruz (RTV). Pavón, quien mantiene amistad con la familia del gobernante en turno, Javier Duarte, sabe mucho sobre los dineros que le dieron al cuñado de Calderón Hinojosa.
Tan burdos eran en la fidelidad que se inventaron programas y planes para justificar los contratos millonarios con el proveedor de servicios informáticos como el Plan Estrategia Electrónica de Atención Ciudadana (EEAC) que, según se promocionó desde el mismo gobierno estatal, se haría con apoyo de tecnología de Oracle E-Business Suite, Oracle Internet Application Server y Oracle Portal. Vaya, era tan ambicioso ese plan, enmarcado en las llamadas “Ciudades digitales de Iberoamérica” que incluirá la instalación de canales de atención presencial vía satélite para el ciudadano y la línea telefónica 01800FIDEFIEL -denominada así para saciar la megalomanía del innombrable que tenía obsesión de poner su nombre en todas partes-
Además, se dijo que proveería el servicio de internet a 10 mil localidades veracruzanas y hasta la instalación de kioscos a lo largo y ancho del estado para que todos los ciudadanos pudieran tener servicio de internet gratuito y de alta velocidad. Por supuesto, todo fue una farsa, una “fideliña” como bautizaron a las mentiras del ex gobernante, pues lo único real fue el nominativo de la línea telefónica sin costo alusivo al ínclito. Más tarde trascendió que tal soporte de telefonía habría sido utilizado para los operativos mapachiles en los comicios locales, especialmente en las elecciones del 2007, con el fin de robarse 100 mil votos para imponer como ganadores a los candidatos priistas a alcaldías y diputaciones locales.
Según los audios difundidos por el Reforma en una reunión encabezada por el innombrable el 2 de septiembre de ese año -una semana antes del domingo de las votaciones- en la Academia de Estatal de Policía, ubicada en la comunidad de El Lencero del municipio de Emiliano Zapata se instruía a “técnicos electorales” y “profesionales” en el hurto de votos con el fin de “sepultar” a la oposición, de acuerdo a las palabras del mismo ex funcionario. Para eso se usó una red de 12 mil 800 teléfonos públicos en todas las rurales para recibir información y dar instrucciones a mapaches priistas, golpeadores y funcionarios de casilla, como parte del fraude comicial.
Esa red telefónica tentativamente fue estructurada para atender contingencias ambientales y su encargado fue Ranulfo Márquez Hernández, entonces secretario estatal de Protección Civil -quien fue sorprendido en otro audio en el 2013 también en cuestiones mapachiles, lo que le valió ser destituido como delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol)-. En eso acabó la línea telefónica FIDEFIEL, que le habría diseñado el cuñado de Calderón al innombrable, en el robo de elecciones. Ahora la pregunta obligada es: ¿Oracle-Hildebrando sigue como prestador de servicios en el duartismo?
UN MES Y SIGUE AHÍ
El lunes se cumplió un mes de que fue localizado el cuerpo sin vida del compañero periodista Gregorio Jiménez de la Cruz, allá en el sur del estado, y Arturo Bermúdez Zurita continúa inamovible como titular de la Secretaría de Seguridad Pública. La dependencia está en predicamento, señalada de ineficiencia y lo más grave, de complicidad con los criminales, pero ahí sigue su titular. El caso del reportero sureño es uno de tantos indicios de que la SSPE bermudiana es inservible y/o coludida con lo inconfesable. El protocolo para rescatar al periodista plagiado el 5 de febrero pasado tardó más de una hora en activarse y cuando se hizo fue con una ineficacia pastosa.
Así lo documentaron los integrantes de la llamada Misión de Observación que visitó la entidad para revisar el expediente judicial del caso y recoger directamente los testimonios en torno al mismo. Los activistas de diversas organizaciones defensoras de reporteros aseguran que hubo desidia de Bermúdez Zurita, para buscar al reportero plagiado, al grado de que pasaron siete días para localizarlo y cuando lo hicieron ya estaba sin vida. La inoperancia del protocolo de búsqueda, sostienen los observadores, no puede atribuirse ni al azar ni a las circunstancias sino a la incapacidad y sobre todo a la irresponsabilidad para efectuarlo.
Si el protocolo se hubiera activado inmediatamente y se hubieran usado helicópteros para localizar al vehículo en el cual trasladaban a Gregorio Jiménez y si hubieran funcionado los retenes de revisión en carreteras y el famoso Mando Único Policial, éste hubiera sido rescatado vivo. Nada ocurrió porque los policías de Bermúdez Zurita, fallaron, no se sabe si errar fue a propósito por una posible colusión con el crimen, deducen los activistas. Por ello, es menester recalcar que se cumple un mes de que hallaron a Gregorio sin vida pero Bermúdez sigue ahí, inamovible, del brazo del gobernante en turno, arropado, consentido. ¿Por qué será?
Es más, en las últimas horas un empresario del transporte público fue asesinado en Tlapacoyan, una maestra fue victimada en Xalapa, una dentista plagiada en Córdoba pese a que está vigente el Mando Único Policial desde hace un año, los delincuentes robaron la décima sucursal bancaria y a pesar de todo eso Arturo Bermúdez sigue ahí, en el gabinete duartista. ¿Qué vigila, qué hace, en qué ocupa su tiempo, en qué gasta el presupuesto para la seguridad y lo principal: de qué le sirve a los veracruzanos? Sólo el gobernante en turno sabe la respuesta porque para los 8 millones de ciudadanos es un misterio la permanencia de tan nocivo personaje.
