Córdoba.- Demetrio Cándido, el vendedor de semillas que se rebeló contra la dependencia de Comercio y pasó 24 horas sin comer como protesta, aún no ha sido restablecido en su lugar de venta. Cándido decidió poner fin a la huelga de hambre después de que el Ayuntamiento se comprometiera a permitirle vender en el lugar donde lo había hecho en los últimos siete años. De momento, el gobierno municipal no ha cumplido con su palabra.
“Hasta ahora no ha habido seriedad en encontrarle una solución al asunto de Demetrio Cándido, problema ocasionado por el mismo personal de la coordinación de Comercio al insistir ante el gerente de un establecimiento que lo desalojara del lugar”, explicó el dirigente del Frente Popular Revolucionario (FPR), Andrés Gómez Ojeda.
Gómez afirma que el Ayuntamiento sigue sin “mostrar seriedad” ante las demandas de esta organización que, en todo momento, “ha estado dispuesta al diálogo”. La FPR ha pedido con insistencia la destitución de Aníbal Olivares como jefe de inspectores de la coordinación de Comercio. Según Gómez Ojeda, Olivares es el principal causante de la violencia ejercida contra vendedores ambulantes como Demetrio, un hombre con cinco hijos y sin un techo donde cobijarse.
“Aníbal y su séquito de inspectores trata a los ambulantes como delincuentes, cuando simplemente son personas que están tratando de conseguir honestamente un poco de dinero para llevar a casa”.
Demetrio Cándido se puso en huelga de hambre la tarde del pasado miércoles, levantándola 24 horas después ante el compromiso del Ayuntamiento para resolver su demanda: la restitución a la avenida 3 calle 7.
Ricardo Jacome Zavaleta
El Buen Tono