Orizaba.- Un buen número de personas de la tercera edad alcanzó una pensión luego del cierre de las fábricas textiles, y aunque esos recursos son muy bajos e incluso su calidad de vida es mala, no pueden ingresar a los programas del Gobierno federal, por lo que su situación financiera empeora, reconoció el enlace municipal para los programas federales, Ignacio Tzopil.
Refirió que anteriormente se le denominaba apoyo lo que el Gobierno federal entregaba, ahora, al ser pensión, limita mucho más la posibilidad de que las personas con esa vida precaria puedan ingresar a los programas.
Indicó que las pensiones que reportan las viudas o ex trabajadores de la zona fabril de Río Blanco son de montos máximos de 2 mil pesos al mes y la que instituyó la Federación por medio de 65 y Más, es de mil pesos bimestrales.
Aunque pareciera mínimo el dinero que obtienen, para quienes lo reciben es una ayuda que canalizan a la alimentación o compra de medicinas, “es lo que más demandan estas personas y otras tantas que siguen en lista de espera, pues la necesidad es mucha”, indicó.
Con todo ello, ahora suman 1,200 los adultos que reciben este programa de 65 y Más, eso da una idea de la enorme necesidad que prevalece en las personas de la tercera edad, destacó.
Matilde De los Santos Parada
El Buen Tono