Nogales.- Personal del Ayuntamiento desalojó ayer de las inmediaciones de la laguna de Nogales a unos 40 comerciantes que se instalan en ese lugar, lo que provocó quejas en contra del alcalde, Antonio Bonilla Arriaga.
Los afectados aseguraron que no les avisaron con tiempo de las acciones ni del desazolve del afluente y que los sacaron de manera prepotente, por lo que temen sea una estrategia para reacomodarlos en otros lugares.
Desde las 11:00 horas de ayer, los vendedores de antojitos, renta de lanchas y artículos para nadar se reunieron en una parte de la laguna para protestar en contra de las acciones porque no les dieron tiempo de guardar sus pertenencias de manera correcta.
“Somos todos los comerciantes de la laguna y nuestra inconformidad es porque no nos avisaron con tiempo de los trabajos que iban a hacer, estamos conscientes de que es algo necesario para prevenir inundaciones, pero debieron ponernos al corriente para que hubiésemos guardado nuestros productos”, dijo una de las afectadas, María Jiménez.
Añadió que ahora temen no los dejen volver, “queremos que cuando acaben de dragar la laguna nos regresen a nuestros lugares en los que trabajamos desde hace años, y de dónde sacamos para mantener a nuestros hijos”.
Carlos Guevara
El Buen Tono
