Córdoba.- A pesar de las múltiples quejas ciudadanas expresadas a través de este medio de comunicación, todas ellas relacionadas con el nepotismo instaurado en el Ayuntamiento de Córdoba, la Contraloría Municipal no ha iniciado hasta el momento ninguna investigación sobre este hecho.
Su desidia constituye un ejemplo más de la burla a la que son sometidos los gobernados ante unas dependencias municipales que, al parecer, sólo sirven de “tapadera”.
El pasado 13 de febrero, el ciudadano Juan Carlos Fernández Zulueta envió un oficio a la Unidad de Acceso a la Información Pública Municipal para saber si existía alguna investigación acerca de nepotismo contra ediles, directores o coordinadores de área. En caso de que la respuesta fuera afirmativa, solicitaba el número de expediente, contra quién se realizaba esta investigación, y la sanción que se pretendía aplicar.
Sin embargo, la dependencia a cargo del licenciado Ignacio Gerónimo Córdoba Carrillo, respondió a este ciudadano mediante un oficio en el que le comunicaba que la Contraloría Municipal “no estaba realizando ninguna investigación”, a pesar de la información publicada reiteradamente en los medios de comunicación.
Esta es la respuesta de la UAIPM ante los hechos de nepotismo, una muestra más de que no existe ningún compromiso del Ayuntamiento por investigar la impunidad que impera en las decisiones de algunos servidores públicos.
En definitiva, la contraloría manifiesta así su carácter y voluntad de actuar como “tapadera” para cubrir las políticas corruptas de los gobernantes. Su titular, la señora Teresita Jáuregui, quien devenga un sueldo para cuidar los intereses de la ciudadanía, no puede pedirle a alguno de sus familiares o conocidos que presenten una denuncia para que ella se ponga a investigar… Porque para eso le pagamos, ¿o no?.