Los habitantes de Nuevo León que padezcan COVID-19 y no cumplan con las medidas sanitarias correspondientes se harán acreedores a una multa económica y tres años de prisión.
Las personas que no cumplan con el aislamiento y pongan en riesgo la salud de los demás, serán sancionadas.
De acuerdo con el titular de la Secretaria de Salud del estado, Manuel de la O, la multa entrará en vigor a partir de mañana 30 de junio.