El observatorio espacial de rayos X Chandra, de la NASA, captó el estallido de un agujero negro que emitía material incandescente al espacio y, sin embargo, su fuerte gravedad arrastró incluso a su estrella acompañante hacia un disco que desprendía rayos X a su alrededor.
En las grabaciones obtenidas, parte del gas caliente del disco cruza el ‘horizonte de eventos’, el punto de no retorno, y es consumido por el agujero negro, mientras que otra parte del gas resulta expulsada a chorros desde su interior y en direcciones opuestas, a lo largo de las líneas del campo magnético.