Sudán.- El vicepresidente de Sudán del Sur, Riek Machar, anunció que él y su esposa, la ministra de Defensa, Angelina Teny, dieron positivo a la prueba de COVID-19.
En el anuncio, hecho vía televisión, el funcionario afirmó que entre los contagiados están otros responsables de gobierno, aunque no especificó cargos y anunció que se someterán a una estricta cuarentena, además de cumplir con las especificaciones médicas.
Durante la semana pasada también se informó de la detección de los dos primeros casos de COVID-19 en un campo de refugiados a las afueras de la capital. La noticia causó alarma, pues el país del este africano contabiliza cerca de un millón 500 mil desplazados, de los cuales 200 mil viven en los campos de refugiados para víctimas del conflicto interno.
Sudán del Sur fue uno de los últimos países en registrar casos de COVID-19, lo que generó preguntas entre el personal médico sobre si las pruebas de detección estaban fallando.
Hasta el momento, de acuerdo con las cifras de la Organización Mundial de la Salud, se han registrado 282 casos de COVID-19 y cuatro decesos como consecuencia de la enfermedad.
A mediados de marzo, Sudán del Sur suspendió los vuelos desde países afectados por la nueva cepa de coronavirus como Egipto y Emiratos Árabe Unidos. Además, se impuso un toque de queda como parte de las medidas preventivas contra el contagio de COVID-19.
