CDMX.- La Unión de Pequeños y Medianos Industriales del Pan (Upmipan) anunció que reducirá el gramaje de las piezas de dulce, debido a que les incrementaron los insumos, pero no pueden trasladar el alza al consumidor, ya que sus ventas de por sí son bajas por la pandemia de Covid–19 y las altas temperaturas.
El dirigente de la agrupación, Juan Pérez Martínez, informó tras consensuar con los propietarios de las 20 panaderías agremiadas, quienes no vislumbran una reducción en los precios de la materia prima, determinaron hacer más pequeño su producto.
“Normalmente un pan pesa entre 80 y 100 gramos, se le va a bajar 20 gramos a cada pieza para podernos ayudar y hacerle frente a estos incrementos. No es mucha la diferencia porque son 20 gramos, pero de alguna manera nos ayuda también a nosotros a que no mermen tanto las ventas”.
Los panaderos no solo son afectados por la pandemia sino porque en esta temporada de calor la población suele disminuir el consumo de pan; actualmente han caído 50 por ciento sus ventas.
Detalló que el bulto de harina se elevó entre 50 y 60 pesos, por lo que ronda entre 430 y 440 pesos, dependiendo de la marca.
La lata de manteca que estaba en 530 pesos ahora la compran en 630 pesos, es decir que aumentó 100 pesos, equivalentes a 18.8 por ciento.
En el caso del huevo lo compran entre 40 y 42 pesos por kilogramo. Cabe referir que este es uno de los productos que más ha encarecido durante este periodo de emergencia sanitaria.
Con respecto al bulto de azúcar, actualmente es el insumo más caro para las panaderías, ya que lo adquieren desde 930 hasta mil pesos por bulto, cuando anteriormente tenía un costo de 730 pesos, lo que implica aumento de 27.2 por ciento.
El precio unitario de las piezas de dulce, indicó el dirigente, se mantiene en 5 pesos, mientras que las tortas permanecen en 2.50 pesos cada una.
Aunque hay algunos establecimientos que las venden a 1.50 pesos por mayoreo. Juan Pérez Martínez acusó que no cumplen con sus obligaciones fiscales y generan competencia desleal.
“Están irregulares, no están en regla, no pagan impuestos; son desleales en todos los sentidos. Ha sido difícil, pues es la mayoría”.
Comentó que es por ello que son pocas las panaderías afiliadas a Upmipan, aproximadamente una veintena.
Recién se creó la unión, recordó, eran más agremiados, pero en cuanto se les pidió mantenerse en regla, varios emigraron.
Estimó que hasta hace dos años eran aproximadamente 700 panaderías y hornitos que operaban de forma irregular y aunque se les ofreció incorporarse a la Upmipan, se negaron para evitar ponerse al corriente ante Hacienda.