CÓRDOBA.- Indignante y doloroso, no hay palabras que justifiquen tales hechos aberrantes. El 15 febrero debe marcar un antes y un después, nunca más se debe tocar la vida de un menor de edad, como la de la pequeña Fátima, quien desapareció el 11 de este mes cuando fue entregada a la salida en la escuela Enrique Rébsamen a otra persona que no era de su familia y, cuatro días después, aparecieron sus restos. Evidentemente fue torturada y asesinada en la Ciudad de México.
Ahora sí las autoridades quieren actuar y resolverlo y eso no está mal, lo preocupante es que sólo se actúa con rapidez cuando el suceso conmociona al país, pero no se dan cuenta o no quieren reconocer que están absolutamente rebasadas, porque los índices de criminalidad crecen cada día. Es necesario que senadores y diputados autoricen leyes férreas y se apliquen para que con el ejemplo se frenen las negligencias y apatía de sectores.
No obstante, el Poder Judicial es el que debe dar un giro de 180 grados, porque la sociedad mexicana está en el umbral del hartazgo y conmoción al comprobarse día tras día que en los Juicios Orales muchos abogados están en contubernio con jueces que tuercen las leyes, que son sueltadelincuentes y que es más que obvio que a través de “moches” son cómplices de los delincuentes, porque son aprehendidos un día y al siguiente salen.
No vamos lejos, una muestra más de las grietas institucionales se dio en el estado de Veracruz con la inexplicable resolución de la juez de Control, Dulce María Mendoza Rosas, al dejar en libertad y no vincular a proceso a cuatro individuos, entre ellos dos policías, capturados en Paso del Macho, por su presunta responsabilidad en la desaparición forzada de personas, pese a que hay pruebas suficientes para la formal prisión y ese caso fue descubierto por la magnitud de la situación, al estar involucrados elementos de Seguridad, pero cuántos y cuántos más individuos que son detenidos y después se conoce que están libres porque cometieron otro delito, y entonces los ciudadanos preguntan ¿qué hacían en la calle si estaban bajo proceso?