Madrid.- Emilio Lozoya Austin, ex director general de Petróleos Mexicanos (Pemex) durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, será trasladado de forma inminente a Madrid, al penal de alta seguridad de Soto del Real, donde compartirá cárcel con su exsocio y presidente de Altos Hornos de México (Ahmsa), el empresario Alonso Ancira.
El ex político priista se encuentra detenido en la prisión de Alhaurín de la Torre desde el pasado 13 de febrero, tras ser detenido en el fraccionamiento de lujo de La Zagaleta, un refugio de multimillonarios rusos, chinos, árabes y estadounidenses, en donde también se han refugiado criminales y mafiosos de todo el mundo.
La agencia española Europa Press, en un cable fechado en Santiago de Compostela, Galicia -donde Emilio Lozoya tejió alianzas con varias empresas de astilleros- informó del inminente traslado de Lozoya Austin a Madrid, citando “fuentes del caso”.
Lozoya Austin está preso en Málaga, pero por la complejidad del caso y dado que el juzgado de la Audiencia Nacional, que finalmente será el que decida su futuro se encuentra en Madrid, su traslado a la capital de España era una decisión que se daba por hecho. Tanto la defensa, como la Fiscalía y el magistrado instructor, Ismael Moreno.
De hecho, lo mismo ocurrió en el caso el empresario Alonso Ancira, quien estuvo unos meses preso en Palma de Mallorca porque pudo acreditar arraigo a la ciudad, pero finalmente fue trasladado a Madrid para estar de forma permanente a disposición judicial.
En Instituciones Penitencias, el órgano que depende del Ministerio del Interior y que es el que finalmente ordenará el día y la hora del traslado, informó a La Jornada que desde esta dependencia “no hemos confirmado ningún tipo de información sobre ningún traslado, dado que pondría en riesgo el traslado y la integridad del preso”.
Actualmente el caso del ex funcionario está abierto y a la espera de que el Estado mexicano, a través de la Fiscalía General de la República (FGR) presente las acusaciones formales contra el detenido y la petición formal de extradición, para lo que tiene hasta 45 días desde el día de la detención.