Orizaba.-“Ni la Diócesis ni un servidor fuimos orquestadores de las manifestaciones que se dieron el pasado viernes en la sala Eiffel del Palacio de Hierro, en el Foro por la Igualdad y la no Discriminación Hacia un Código Civil Incluyente”, señaló el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez, al mismo tiempo que aclaró que la Iglesia condena todo tipo de violencia, verbal o física, especialmente en tiempos como los que se viven.
“Construir puentes, no muros. Hacia una cultura del encuentro”, así inició el sacerdote al puntualizar que la Iglesia reconoce que en una sociedad plural y democrática deben existir leyes que regulen las distintas realidades.
“Entendemos como Ley, la Ley justa que promueva el bien común y el desarrollo de la comunidad. Dicho de otro modo, la Ley debe ser un ordenamiento de la razón, en vistas al bien común, y promulgada por quien tiene a su cargo el cuidado y responsabilidad de la comunidad en el orden legislativo”.
Indicó que se reconoce la separación de la Iglesia con el Estado, al mismo tiempo que “coincide con los grupos en los valores subyacentes por los cuales están luchando, que incluso, ha promovido como son: el reconocimiento de la dignidad de todo ser humano, la no discriminación, la libertad de expresión, la no violencia y la búsqueda de leyes justas”.