Córdoba.- Al menos mil feligreses acudieron junto con sus hijos vestidos de “inditos” a la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, para venerar con una misa oficiada por el obispo Eduardo Patiño Leal, quien reapareció después de varios meses de estar enfermo.
La Eucaristía encabezada por el Obispo, inició a las 12:00 horas, llamó a caminar como cristianos con fe y esperanza, para construir el reino de Cristo y mucha unidad para la familia.
Elevó una oración para los enfermos, por el trabajo y los ancianos, por lo que pidió abrir el corazón para que esas oraciones sean escuchadas, pidió entender el mensaje de la Virgen de Guadalupe, que lo emitió a Juan Diego, un humano de raza indígena o pura.
Tras la Eucaristía, el Obispo pidió un aplauso para la Virgen Morena por parte de los presentes, para finalmente rociar con agua bendita a los niños vestidos con el tradicional traje de “indito”, así como a los danzantes de Santa Rita, quienes fueron admirados por los feligreses después de la misa en honor a María la Virgen.