VERACRUZ.- El gobernador del estado de Veracruz, Cuitláhuac García, reveló que no piensan aportar dinero público para salvar a los Tiburones Rojos de Fidel Kuri.
Si bien reconoció que para el Gobierno del Estado es muy importante que un equipo de Primera División se mantenga en el puerto por la derrama económica que le significa, el que sea desafiliado “no es el fin del mundo”.
“Siempre la Primera División es la aspiración de cualquiera, tener un equipo ahí es la idea. Nosotros vemos muy lastimoso que lo perdiéramos, pero tampoco es así el fin del mundo; nosotros podemos buscar alternativas, nada más que ahorita en el Estado, pues hay otras prioridades como para tener un equipo en Primera División. Nosotros tenemos que atender otras situaciones, pero podemos buscar (alternativas), ya que somos dueños del estadio, decir quién podría entrarle”.
Y es que el dueño del equipo tiene el agua hasta el cuello en cuanto a deudas, lo cual obligó a que este miércoles Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, viajara al Puerto a hablar con los jugadores sobre los adeudos de salarios.
Cuitláhuac García también manifestó que hasta el momento Kuri Grajales no les ha pedido ayuda para solventar las deudas que tiene; además, el gobernador dejó en claro que el nombre de Tiburones Rojos y el Estadio Luis “Pirata” Fuente, son propiedad del Gobierno del Estado y que sólo son prestados a Kuri mientras éste tenga al equipo en la Liga MX. De no poder hacerlo, le retirarían ambas concesiones.
“Nosotros vamos a revisar porque el nombre de Tiburones Rojos es del Gobierno del Estado y hay un convenio con quien lo administra de mantenerlo en Primera. Aprovecharemos las cláusulas, hasta ahorita el dueño no ha recurrido a nosotros para cualquier cuestión de auxilio. A nosotros sí nos interesa mucho mantener un equipo de Primera en Veracruz por la derrama económica.
“Podemos platicar, la verdad no podría destinar dinero pero podríamos intentar otras cosas, dependiendo de cómo está la situación”, dijo el Gobernador en entrevista.
