CD. Mendoza.- El desalojo brutal y violento que padecieron 600 obreros de la exfábrica Civsa el 26 de septiembre de 1991 y el ultraje a sus derechos laborales, quedó en la memoria de los sobrevivientes al cumplirse 28 años mañana jueves, señaló el representante de los obreros despedidos, Hipólito Flores Alonso.
Desde aquel 19 de agosto de 1991, cuando los trabajadores iniciaron el emplazamiento a huelga y colocaron las banderas roji-negras en la factoría y la madrugada del 26 de septiembre de ese mismo año que fue el desalojo orquestado por el Gobierno Estatal, cada año recuerdan lo sucedido por exigir justicia y una solución definitiva al conflicto obrero de ese entonces que dejó saldo la muerte de un obrero y encarcelamiento de 38.
Flores Alonso comentó que a 28 años, sus compañeros de lucha recuerdan al mismo tiempo que aluden haber llegado al acuerdo común con la familia Del Valle para la compra-venta de la Civsa, ahora Hidroeléctrica Santa Rosa, a fin obtener sus finiquitos.
Dijo que aunque no obtuvieron las cantidades que pedían, concretar ese proceso fue un gran paso.
Derivado de su lucha que no se frenó con la venta de la factoría, subrayó que van por buen camino los compromisos verbales de los inversionistas con los despedidos en 1991, ya que recientemente las viudas están recibiendo una pensión, además de que en próximos días se darán las altas ante el Seguro Social de 15 extrabajadores que están en la etapa de ser pensionados.
