Por Andrés Timoteo / columnista
LAS LAVANDERAS
Siguiendo el tema judicial, mientras en todo Veracruz la sangre corre y el imperio del hampa está más fuerte que nunca, el gobernante en turno, Cuitláhuac García, y el fiscal general, Jorge Winckler, siguen enzarzados en un pleito de lavanderas. Uno le ‘echa habladas’ a otro y el otro se las regresa. Mutuamente se han mandado a ponerse a trabajar, se contradicen en cifras y descalifican a sus colaboradores.
Esta semana el oaxaqueño Winckler tuvo un gesto de mal gusto, que degrada su posición frente a la opinión pública. En una conferencia de prensa exhibió un recipiente-termo con la leyenda impresa “¡Culpa es del Fiscal!”, en referencia a los dichos de los funcionarios estatales. Vaya, para que lo vieran los reporteros asistentes hasta dio un sorbo al frasco.
¿Había necesidad de esa payasada? Se supone que en medio de la puerilidad del régimen cuitlahuista él (el Fiscal) era la parte seria y hasta protocolaria. Recurrir a la bufonada del termo azuza el chacoteo, pero también hace risible su trabajo cuando la materia que trata -y de la que informa en sus conferencias- debe llevarse con absoluta seriedad y tacto, ya que implica el dolor y luto social.
Que no se equivoque el funcionario, tal payasada no es una burla al gobernante en turno sino a los veracruzanos, especialmente a los que han sido víctimas de la criminalidad. Si no corrige y ofrece una disculpa pública por la chocarrería, Winckler se merecerá tener como semejante al gobernante en turno. Ambos tan caricatos.
ARDE EL PLANETA
Una segunda onda de calor castiga al Continente Europeo luego de que junio se convirtió en el mes más caluroso del último siglo. En diversos países europeos se registraron, el mes pasado, temperaturas hasta de 46 grados mismas que no se presentaban desde 1901. Según los servicios meteorológicos junio de este 2019 fue el mes más caluroso no sólo del llamado viejo continente, sino del orbe entero.
Las fotografías de parisinos y turistas refrescándose en fuentes públicas, especialmente en los espejos de agua frente a la torre Eiffel, dieron la vuelta al planeta. Son imágenes arquetípicas del calentamiento global. Ahora, un viento proveniente del Sahara africano recorre Europa generando nuevamente temperaturas récord en países como Francia, Alemania, España e Inglaterra. En París ha provocado ya temperaturas superiores a los 40 grados durante esta semana. Tan sólo ayer el termómetro marcó 42 grados.
La onda de calor de la última semana de junio provocó la muerte de 30 personas, quince de ellas en Francia, ahora se espera el saldo del resto de la canícula que, según los expertos en meteorología, podría ser hasta cinco veces más cálida que otros años. El cambio climático es real y algunos estudiosos ya hablan del inicio de un “apocalipsis térmico”, pues hay señales que deben poner en alerta a todos. Una de ellas son los 400 incendios forestales que se han registrado en el Círculo Polar Ártico.
Como nunca, en Alaska -en el Aontinente Americano-, Siberia -en el Asiático-, Noruega Finlandia -en el Europeo- se han suscitado siniestros en sus regiones boscosas y donde la temperatura llega a los 50 grados bajo cero ahora el termómetro está marcando cifras récords de hasta 32 grados. Algo se calienta, algo está ardiendo. ¡¡Es el planeta!!