México, D.F.- En México 50 por ciento del mercado de alimento para mascotas está distribuido entre las clases populares que lo adquieren principalmente en las tiendas de abarrotes, por lo que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) de 16 por ciento que entró en vigor este 1 de enero, afectará a los que menos tienen y por supuesto, a los animales, dijo Antemio Maya Pindter, presidente de la organización Protección del Perro Callejero.
Con la medida que grava la comida para perros, gatos y pequeñas especies, por considerar un lujo mantener en el hogar a una mascota, se agravará el problema de los animales callejeros en el país y las enfermedades de transmisión a los humanos, dijo el experto.
“La croqueta más barata cuesta 300 pesos, más el IVA, son unos 350 pesos y si a eso le agregamos el incremento anual de los insumos, estaremos viendo que la más económica se venderá en casi los 400 pesos. Esto es un aumento muy fuerte que las familias más pobres no podrán sobrellevar”, dijo.
Antemio Maya calificó a la medida de gravar con IVA al alimento para mascotas como un “terrible error”, pues el gobierno no consideró el grave problema de sobrepoblación animal al que hasta el momento, no ha podido hacer frente.
“Las personas que ayudamos al gobierno a sobrellevar la sobrepoblación canina seremos de los más afectados, porque la mayoría mantenemos los albergues con nuestros recursos, pues hay muy poco donativo”, dijo. El activista que preside un albergue para perros en la delegación Gustavo A. Madero en el Distrito Federal, dijo que solo en esa demarcación hay alrededor de 80 pequeños albergues que operan en condiciones precarias.
“En nuestro albergue tenemos 30 perros, porque no podemos tener más y al mes se compra cinco mil pesos de alimentos, croqueta de la más barata. Con el IVA más el incremento anual de los insumos vamos a pagar unos mil pesos más, por la misma cantidad de alimento”, detalló.
Con el aumento al precio de las croquetas se presentarán dos fenómenos que los legisladores no consideraron: las enfermedades y el abandono, dijo Maya Pindter.
Una familia de clase popular que tiene una mascota optará por dejar de comprar la croqueta y alimentará al animal con sobras de comida, lo que abonará a que el perro o gato enferme más fácilmente y se incrementen las enfermedades de transmisión a los humanos.
“Es un problema muy serio. Mucha gente los va abandonar porque ya no podrán mantener a dos o tres perros que tienen. Esta medida va afectar al sector más desprotegido, la Ley considera que tener un perro es un lujo, eso quiere decir que una persona de escasos recursos no puede tener uno”, dijo.
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