Asunción comienza este sábado a recuperarse del caos desatado por la fuerte tormenta que golpeó el viernes la capital, que quedó prácticamente inundada y sin luz durante varias horas, la deteriorada imagen de una urbe que en pleno siglo XXI no se ha dotado de un efectivo sistema de desagüe fluvial.
Aguas arrastrando vehículos y basura, conductores atrapados y rescatados por el cuerpo de bomberos, caños reventados y convertidos en potentes surtidores y tramos de pavimento levantados por las riadas son parte de la fotografía que se apoderó de Asunción la tarde del viernes.