Cosocmatepec.- Intensa movilización de elementos de la Policía municipal y de Protección Civil se suscitó la noche de este 1 de enero, cuando 19 personas se reportaron como desaparecidas en las faldas del Pico de Orizaba y no fueron halladas sino hasta la mañana del 2 de enero, afortunadamente en perfecto estado de salud, después de decidir acampar en una casa de guardabosques al averiarse la camioneta en la que viajaban, y en la cual iban seis menores de edad, unos apenas meses de nacido.
El primer reporte se hizo alrededor de las 21:50 horas del 1 de enero, cuando la Policía municipal recibió dicha información otorgada por pobladores de la comunidad de Tetelcingo, quienes indicaban que una familia de 19 personas de esa misma localidad había viajado desde temprano a las faldas del Pico de Orizaba y no habían regresado.
A partir de ese momento, tanto uniformados como elementos de Protección Civil, al mando de Francisco Javier Pérez Tamburrino, se dirigieron a buscar a la familia cerca de las 11:50 horas, ya con la compañía de Juan Moreno Avelizapa, coordinador de Protección Civil estatal en la zona de Huatusco, e incluso con la ayuda de las mismas corporaciones del municipio de Calcahualco; fueron alrededor de 20 elementos quienes subieron a la comunidad de El Jacal y al albergue de Piedra Grande, sin encontrar nada.
Debido a la oscuridad y a las condiciones adversas, se decidió suspender la búsqueda cerca de las 4 de la madrugada para comenzar de nuevo a las 6 de la mañana, tomando una misma ruta, y al llegar a la comunidad de El Jacal, lograron visualizar la camioneta reportada, donde vieron a algunos integrantes de la familia que se encontraban junto a la unidad.
Al dialogar con ellos, los más longevos indicaron que habían tenido una falla mecánica, y por ello decidieron pernoctar en esa comunidad, logrando refugiarse en una cabaña de guardabosques; afortunadamente, todos todos los integrantes de la familia fueron hallados en buen estado de salud, siendo finalmente ayudados y acompañados a la comunidad de Tetelcingo para el encuentro con sus demás familiares.
Mauricio Láinez Vázquez
El Buen Tono
