Córdoba.- Joaquín Guzmán Loera, (a) “El Chapo Guzmán”, fue detenido ayer en Córdoba, en una acción que causó revuelo nacional e internacional, por tratarse de uno de los narcotraficantes más buscados, desde su fuga hace ya casi 13 años, en Jalisco. El hecho se logró en un fuerte operativo en el que participaron más de un centenar de policías de los 3 niveles de gobierno.
Anoche, no circuló información en los medios, ni las redes sociales, debido a que aún no se confirmaba si se trataba de este personaje.
El narcotraficante, principal objetivo de las autoridades de México y los Estados Unidos, se fugó del penal de “Puente Grande”, Jalisco, el 19 de enero del año 2001, al esconderse en un camión de la basura, durante el sexenio del ex presidente Vicente Fox Quesada, y durante 13 años anduvo a “salto de mata”.
Aunque en varios años estuvo a punto de ser detenido por la Procuracuría General de la República, en estados como Sinaloa y Baja California Sur, durante festejos, siempre se había escapado, pero ayer por fin fue capturado de nueva cuenta en esta ciudad, que desde ahora será más famosa por este hecho.
Aún cuando el fuerte dispositivo de seguridad se manejó sin la presencia de la prensa, por los riesgos, se conoció que fue aprehendido en una casa de seguridad, ubicada a orillas de la autopista Córdoba-Veracruz, cerca de donde fue capturado otro narcotraficante denominado “El Lucky”, en el año pasado.
Escoltado por elementos de la PGR, el Ejército y la Marina, el jefe del cártel de Sinaloa, fue subido a un helicóptero, donde quedó a disposición de las autoridades federales, donde se pidió estricta vigilancia del narcotraficante, para que ya no se les vuelva a escapar, ni que tampoco lo vayan a soltar como ocurrió recientemente con Rafael “Caro” Quintero.
Una vez más, queridos lectores, les volvemos a recordar que hoy es día de los “Santos Inocentes”, y por lo tanto no es bueno creer todo lo que se dice de los personajes de la vida pública y privada.
Antonio Osorio
EL BUEN TONO
