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EL MINUTERO

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INCENDIO CONTAMINANTE
El incendio forestal en Las Vigas de Ramírez que devoró al menos 600 hectáreas ya habría sido sofocado, según el reporte de las autoridades. Fue uno de los siniestros más graves que se han registrado en territorio estatal. También en estos días hubo otros en los municipios de Maltrata, Acultzingo y Astacinga. Dos ya fueron controlados y en otro siguen las labores para sofocarlo.

La conflagración de Astacinga cobró ya una víctima, un hombre murió supuestamente asfixiado por el humo. Esos cuatro siniestros registrados cuando todavía es invierno anticipan que este año será atípico en cuanto a estos imponderables provocados por una sequía prolongada y que, con la llegada de los meses calurosos, el riesgo de que se multipliquen los incendios forestales.

De ahí la importancia en la educación ecológica y de salvaguarda en todos, desde los campistas que encienden fogatas hasta los excursionistas o lugareños mismos que arrojan basura en zonas arboladas. Una colilla de cigarro no apagada puede iniciar un incendio, al igual que un vidrio que puede generar el llamado “Efecto Lupa” -cuando los rayos del Sol elevan su intensidad al pasar el cristal y generan igniciones- y desatar siniestros inapagables.

Pero además de las conflagraciones forestales, en la zona centro hay otro incendio que también parecer ser inextinguible en el basurero de cuitláhuac, mismo que ayer jueves cumplió un mes de estar activo. Las veinte hectáreas de ese tiradero se prendieron el pasado 14 de febrero y a pesar de las maniobras, el lugar sigue ardiendo.

El daño ambiental por el basurero incendiado también es enorme, porque si bien no hay flora ni fauna diezmada el humo generado es tóxico debido a las sustancias químicas que generan los desechos sólidos y los lixiviados. Estos, al quemarse, forman dioxinas organocloradas y organofosforadas que se esparcen en partículas a través del humo y que son respiradas por personas y animales o caen en depósitos de agua, manantiales, arroyos, ríos, campos de cultivo o de pastoreo de ganado.

Las dioxinas son venenos de mediana o larga duración que en el organismo humano puede generar, también a largo plazo, mutación celular, es decir, enfermedades cancerígenas o malformaciones genéticas en los fetos. Esta información no es alarmista sino de alerta porque el dilatado incendio en el basurero de cuitláhuac es un verdadero foco de contaminación que pone en peligro la salud de todos los pobladores de la zona.

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