México, D.F.- La Procuraduría General de Justicia del estado de Tamaulipas (PGJE) modificó este jueves la versión sobre el caso de los cinco estudiantes que perdieron la vida en Reynosa al ser atropellados por dos sujetos que supuestamente huían de un convoy militar.
Ayer, la dependencia informó que la causa de la muerte de los jóvenes fue una persecución de elementos militares a presuntos sicarios en el que resultaron lesionadas también Sandra Reyes Garza, de 31 años, y Areli Fernández, de cinco.
No obstante, este jueves corrigió la información y aseguró que no existen elementos para determinar que los delincuentes hayan sido perseguidos por personal del Ejército.
“Conforme a las investigaciones y las constancias que obran en la averiguación previa del caso, no existen elementos que permitan determinar que los delincuentes hayan sido perseguidos por personal militar, como se informó con anterioridad”, indicó.
Además, la PGJE señaló que los estudiantes estaban esperando el transporte público, pero testigos declararon que los menores pretendían cruzar la carretera para llegar al Fraccionamiento Paseo de las Flores, donde vivía la mayoría de las víctimas.
Según el comunicado difundido ayer, dos hombres armados huían de elementos del Ejército a alta velocidad a bordo de una camioneta Pick-up Chevrolet Silverado roja, modelo 2005, de cuatro puertas.
En la persecución, agregó, los delincuentes perdieron el control del vehículo, que impactó a los cinco estudiantes que esperaban el camión en el kilómetro 209 de la carretera Reynosa-San Fernando, y a una mujer y una niña que resultaron lesionadas.
Luego de atropellar a los estudiantes, reveló la PGJE, la unidad de los dos civiles armados se impactó contra otros vehículos que se encontraban estacionados en las cercanías de la escuela.
Dicha versión, aclaró, se tejió con base en los testimonios recabados por personal de la delegación de la PGR en Reynosa.
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