CDMX.- Uno de los principales problemas que enfrenta Petróleos Mexicanos (Pemex) a nivel nacional es el robo de combustibles; sin embargo, esta situación ha ido empeorando desde los sexenios de Vicente Fox, Felipe Calderón y Peña Nieto.
El pasado 27 de diciembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó el plan de seguridad del Gobierno Federal para hacer frente al huachicoleo que se presenta en varias entidades del País.
Ese día AMLO precisó que desde el mandato de Fox se sabía del hurto de hidrocarburos, pero las administraciones pasadas hicieron caso omiso al problema, por lo que declaró: “Desde hace tres sexenios sabían del robo, pero desde el 2000-2003 se aceptaba que se robaban 12 mil millones de pesos y ahora estamos hablando de más de 60 mil millones de pesos, es decir, ha ido creciendo sin que se haga nada al respecto”.
Los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto absorbieron los recursos de Pemex e hicieron a un lado la inversión en logística y en refinación.
Mover gasolina por pipa es 14 veces más caro que hacerlo por ducto. Con todo y el robo de combustible, no tiene sentido la estrategia de distribución, que ha provocado desabasto. El huachicoleo es el síntoma, no la enfermedad. Ésta se llama falta de respeto al Estado de derecho.
La deuda que contrajo Petróleos Mexicanos fue creciendo y se originó porque no tenía los recursos suficientes para sus gastos de operación.