Por: Andrés Timoteo / columnista
Aunque no se ha confirmado, pero hay la versión de que el gobernador Cuitláhuac García acudirá a la zona Centro para atestiguar el inicio de la zafra 2018-2019 y lo haría concretamente en el ingenio El Potrero, ubicado en el municipio de Atoyac la semana próxima. Esto en respuesta a la invitación de organizaciones cañeras para que el Mandatario estatal acuda a esa factoría donde apenas terminó un bloqueo que realizaron los productores cañeros por adeudos pendientes que tenían los empresarios.
De ser certera la versión, entonces también se abriría un espacio para que el Gobierno estatal muestre su interés en la agroindustria azucarera, que es el motor en decenas de municipios veracruzanos y a la vez uno de los sectores más golpeados por los vaivenes económicos, la corrupción de los empresarios y la política neoliberal que se aplicó durante 36 años en México.
Actualmente hay 18 ingenios en Veracruz, pero al menos cuatro de ellos están paralizados, inactivos porque quebraron financieramente, y eso sucedió no porque el cultivo de caña de azúcar y la producción del endulzante no sean negocio sino porque los propietarios literalmente saquearon las fábricas sin importar la afectación a trabajadores y productores agrícolas.
La presencia de García Jiménez en El Potrero es un buen indicador, sobre todo porque el presidente López Obrador también hizo compromisos puntuales con el campo y especialmente con el sector cañero. No hay que olvidar que en su campaña prometió rescatar la agroindustria azucarera y especialmente a las familias que dependen del cultivo de la gramínea.
“La caña, el azúcar no sólo genera riqueza, sino distribuye riquezas, es de las actividades económicas que más distribuye riquezas, porque depende de la industria azucarera: el productor, sea comunero, el ejidatario, el pequeño propietario, el trabajador del ingenio, los comerciantes, los transportistas, los talleres mecánicos, y vamos a ayudarlos a todos ellos”, dijo en su mensaje de proselitismo.