Córdoba.- Enojo de conductores, tanto de unidades particulares como de autobuses, es lo que expresan después del escaso avance de la obra de la avenida 6 y calle 9, pues ambas arterias están cerradas por mantenimiento y automovilistas deben tomar rutas alternas; sin embargo, esto provoca una mayor pérdida de tiempo para realizar sus actividades o llegar a sus destinos.
Un par de obras tiene en jaque a los conductores de la ciudad, sobre todo las personas que van al mercado Revolución o deben circular por la avenida 8 con dirección a San Miguel o la Central Camionera, pues durante gran parte del día existe mucho tráfico.
Además, mientras un trabajo está por terminar, cierran otra calle para su compostura y vuelve a enojar a los automovilistas, quienes buscan opciones donde pasar para evitar este problema, pero sobre todo el tráfico que se hace en la avenida 2 y 4, añadiéndose la arteria de la calle 9.
Los cintos amarillos se hicieron visibles y estorbosos para los transeúntes que tienen que realizar maniobras para poder pasar y atravesar las calles inconclusas que también representan un peligro para las personas mayores.
Don Juan Huerta Gómez, de 60 años, precisó que va al mercado Revolución todos los días para comprar verduras, pero con el polvo, piedra y tierra que existe en las banquetas se le hace difícil caminar por el lugar donde se construye.
“No hay carros, pero aun así no puedo caminar igual, ya que debo de tener cuidado cuando piso, esperando no resbalarme y poder tener un accidente”, expuso.
Las señoras que andan aprisa también tienen la problemática, ya que los cintos de precaución no están a una altura adecuada y terminan enredándose, principalmente si van cargando sus mandados o llevan con ellas a sus hijos y podría haber un accidente.