Región.- En al menos 12 centros de Salud dependientes de la Jurisdicción Sanitaria Número 7 y ubicados en municipios rurales, los pobladores siguen siendo objeto de tratos discriminatorios y déspotas de parte del personal médico y de enfermería, señaló el activista Rodrigo Dorantes Herrera.
Precisó que lo anterior es de acuerdo con las quejas que capta de parte de mujeres de El Encinar, Necoxtla, El Xúchil, Tlaquilpa, Palo Verde, Atzompa, Xoxocotla y de otras localidades, en donde ha impartido el taller de Equidad de Género como parte de sus labores.
“Oímos que hay mejoras, sobre todo con el trato que brinda el personal de las unidades médicas; sin embargo, por el mal comportamiento de unos cuantos empleados del Gobierno pagan todos, la imagen del trato discriminatorio hacia los pobladores rurales no ha cambiado del todo”, expresó.
Precisó que la inconformidad más común es que en diversas ocasiones, con dolor o alguna complicación de enfermedad, los habitantes han acudido a solicitar atención de urgencia y los doctores en turno los han hecho esperar hasta hora y media sin justificación.
Agregó que también se enfrentan a la problemática de que les niegan la atención médica porque terminó el turno, falta de médicos en su horario de trabajo y escasez de medicamentos básicos para las enfermedades crónico-degenerativas o incluso para gripes e infecciones.
Consideró que se trata de una situación que se debe acabar en beneficio de los más necesitados, especialmente en el caso de los menores de edad.
