El escándalo del tráiler refrigerado que anduvo paseando 273 cadáveres en los municipios de la Zona Metropolitana de Guadalajara, se convirtió en un tema de conversacion a nivel Mundial, donde México sorprende con hechos cada vez más atroces.
El sombrío suceso destapó un problema que ya era conocido en el país, pero que las propias autoridades federales y de las entidades federativas han subestimado, sin darle solución, ante un inminente cambio de Gobierno y el abandono de las responsabilidades que les corresponden a quienes ya se van.