Atzacan.- Un grupo de 50 habitantes de La Sidra “tomó” ayer por la mañana el Palacio Municipal para exigir a las autoridades locales que les introdujeran a ellos primero el agua potable en lugar de a la comunidad de Dos Ríos.
Con su acción impidieron la entrada al edificio de los trabajadores de las diferentes áreas, así como del DIF y de la Policía Municipal, además de que interrumpieron los servicios que otorgan cotidianamente a la población.
Cabe hacer notar que cuando llegaron al lugar, el alcalde Octavio Misael Lorenzo Morales no se encontraba en sus oficinas, por lo que tuvieron que esperarlo durante tres horas para que los atendiera.
La situación se derivó de un mal entendido entre algunas personas que incitaron al resto a llevar a cabo el movimiento de protesta que inició a las 08:30 horas, cuando los integrantes del Comité de Agua de La Sidra, Braulio Luna Hernández y José Varillas Flores, así como el agente municipal Jaime Rivera Paz, llegaron al edificio público.
Explicaron que su inconformidad fue porque tenían conocimiento de que en lugar de utilizar tubos PVC de seis pulgadas, meterían una manguera para ahorrarse dinero.
La versión fue desmentida por el alcalde, Octavio Misael Lorenzo Morales, quien dijo que el material para llevar líquido del manantial Aljocuca a La Sidra sería del diámetro que solicitaban y después cambiar a uno de cuatro pulgadas, a fin de abastecer también a Dos Ríos.
La situación se tornó difícil cuando llegaron pobladores de Dos Ríos, encabezados por su agente municipal Zenaido Gaspar Hernández, por lo que fueron 200 personas las que se congregaron afuera del Palacio Municipal.
Después de un diálogo ambos grupos acordaron unir fuerzas y así ejercer una mayor presión. A las 11:30 horas, llego el Edil para aclarar el asunto.
Tuvo que arribar el delegado de Política Regional, Luis Arturo Flores Cadena, en representación del Gobierno del Estado y así apoyar en la negociación para liberar las instalaciones.
Tras 30 minutos de negociación y la firma de acuerdos, a las 13:45 horas el conflicto se terminó y las personas regresaron a sus comunidades.