Rusia califica de “histeria” las nuevas acusaciones de Washington sobre su presunta injerencia en los procesos electorales en Estados Unidos, mientras expertos rusos advierten del daño a la economía que pueden causar las demoledoras sanciones que prepara el Senado estadounidense.
“La histeria sobre la imaginaria interferencia rusa en las elecciones de EU, que dura ya dos años, no solo está minando las relaciones bilaterales, sino también ridiculiza todo el sistema político de Estados Unidos”, aseguró la portavoz de Exteriores, María Zajárova, en rueda de prensa.
Zajárova respondió así a las recientes acusaciones sobre la influencia que ejerce Moscú en la opinión pública en Estados Unidos a través de las redes sociales, en particular Facebook.
“El Departamento de Estado (de EU), naturalmente, acusó de ello a Rusia. Sin presentar prueba alguna, a nuestro país se le llamó hostil. Por nuestra parte, creemos que los diplomáticos deben atenerse siempre a la ética diplomática y ser conscientes de las consecuencias que puedan tener sus palabras”, aseveró.