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El Baldón: El Gas Shale

Superiberia

 

“El ignorante protesta por lo que le dicen; el sabio, por lo que sabe que está mal”.

Florestán

 

     Se acercan los tiempos de la reforma energética. Es y será usada políticamente. Los mexicanos, en nuestra absoluta ignorancia, estaremos a favor o en contra, por razones sentimentales, más jamás sabremos técnicamente si es necesaria o no, porque no nos preocupamos por enterarnos. También habrá quien se oponga simplemente por desconfianza en la honestidad de las petroleras y de nuestro gobierno y su capacidad de supervisión. Esto último es imposible de negar. Lo técnico es diferente y aquí va un primer avance.

El gas shale, de lutitas o de esquisto, es la vedette de moda en el sector energético mundial. Es tan importante su producción que en 2017, Estados Unidos será el principal productor a nivel mundial. Y sabemos que los gringos no invierten en negocios que no valen la pena. Los americanos ya explotan miles de pozos. La producción de gas shale de EU, en el año 2000, era del 2% de sus necesidades; hoy ya representa el 35% de su consumo. 

Este gas abunda en una roca sedimentaria porosa que se llama esquisto. Para extraerlo, hay que abrir brecha en las formaciones rocosas e inyectar agua con arena y otros químicos como ácidos, cloros y sales a alta presión. Después de extraer el gas, la presión acumulada se libera y el líquido regresa a la superficie en un proceso conocido como fractura hidráulica o “fracking”. Además del gas, de una tonelada de rocas de esquisto bituminoso se pueden extraer hasta 125 litros de petróleo. Cabe aclarar que el potencial de recursos de shale en su forma prospectiva es de 60 mil millones de barriles de petróleo. En el este del país, en el noreste de Chihuahua con gas y aceite (en estudio), en Sabinas Cohahuila con gas seco, en la frontera entre Veracruz y Tamaulipas con gas y condensados, y en Veracruz con aceite, México es de las naciones con mayores reservas, ocupa el 6to. lugar con 545 billones de pies cúbicos recuperables. Por esto, el gas Shale es una prioridad para asegurar la sostenibilidad energética de México. 

Su extracción es riesgosa, y hay que perforar muchos pozos para poder identificar las zonas económicamente explotables. Se requieren datos precisos e investigación de campo. Los pozos de Shale muestran además tasas anuales de declinación muy elevadas, entre 29 y 52% anual. 

Fuentes del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM informan que hay pozos con formaciones de lutitas que contienen petróleo líquido (condensado) y crudo, pero con un volumen indeterminado. Para que la explotación de lutitas sea rentable, se requieren por lo menos de 800 pozos. En Texas se han perforado 3 mil 600 pozos de gas Shale, y Shale oil (petróleo o aceite de esquisto), mientras que en México sólo han sido explorados 10, lo cual no sirve realmente para nada. 

Según Pemex, hay cinco provincias geológicas donde hay yacimientos: Chihuahua, Sabinas-Burro-Picachos, Burgos, Tampico-Misantla y Veracruz. Por cierto, el petróleo de las formaciones rocosas puede venderse a un mejor precio que el gas. Y las regiones más prometedoras son Tampico y Veracruz. 

Explorar y explotar pozos de gas Shale es muy caro, ya que implica un gran despliegue de tecnología y trabajo para fracturar las rocas. En México, se requieren entre 12 y 15 millones de dólares por pozo. Esto porque no existe ni la tecnología ni la infraestructura necesaria para los trabajos, ni las economías de escala. Aquí hay que construir caminos, mientras que en EU ya existen y tienen instalaciones y tanques cercanos para separar los hidrocarburos; también cuentan con oleoductos para su distribución, etc. Por ello, en EU un pozo cuesta entre 3 y 10 millones de dólares. Hoy por hoy, el precio del gas Shale va a la baja, 3.50 dólares por millar de pie cúbico, y el condensado (hidrocarburo líquido) anda en 75 dólares por barril.  

En México si se puede tener éxito y rentabilidad, pero hay que construir nueva infraestructura industrial, caminos, ductos, etc., así como contratar compañías de servicios y proveedores de equipo de alta tecnología. Por ello, la forma más rápida y fácil de explotación es mediante la inversión privada, mediante empresas extranjeras que tengan la tecnología y el personal adecuados. Pemex no tiene esta tecnología, ni el personal capacitado para ello, pues todo es nuevo. 

Una ventaja de la participación extranjera sería que ya no se tiraría el dinero en la exploración de Lutitas, como ha sucedido gracias a la incapacidad y corrupción reinantes en Pemex. A cambio, la inversión, y por ende el riesgo y los beneficios deben ser compartidos. Así, Pemex tendría el beneficio de tecnología de punta, capacitación y aprendizaje de sus técnicos y menores riesgos económicos. 

La explotación del Shale causa daños ecológicos, lo cual implica que es un puente entre la energía basada en hidrocarburos y la energía autosustentable, como lo es la solar, eólica, etc.  México tiene que aprovechar el momento, sobre todo cuando la producción petrolera declina, y la renta petrolera ya no es suficiente para mantener el nivel de bienestar del país, y lamentablemente la única opción viable es mediante la participación de empresas privadas. 

Hoy Pemex no es de los mexicanos, es el negocio privado de los funcionarios corruptos, de los empleados corruptos y de los sindicalizados corruptos. Eso sin contar el robo y venta de derivados del petróleo en la economía informal.  Pensar en defender los privilegios de esos que se benefician sin que el resto de México obtenga beneficios es un absurdo. Hay que pensar como Noruega o como Brasil.  Pemex ha sido descuidado en cuanto a su desarrollo tecnológico (y ha sido a propósito), hoy no nos queda otro camino.   Lo demás es politiquería barata.   

En lugar de discutir si entra la iniciativa privada a invertir en proyectos energéticos, deberíamos discutir cómo eliminar la corrupción en la industria energética nacional.  Eso sería mucho más beneficioso para México. Pero nadie quiere tocar ese tema, porque tiene costos políticos tanto para el PRI como para el PRD. Y cuando el PAN lo pudo hacer, tampoco lo hizo, prefirieron beneficiarse igual que gobiernos anteriores.   

 

www.josecobian.blogspot.com      miguelcobian@gmail.com     

@jmcmex

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