Xalapa.- Antes de tener acceso directo a la orden de aprehensión que girara la Juez Alma Aleida Sosa Jiménez en su contra, el ex Fiscal General del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras, creía que los cargos que se le imputaban eran los de ordenar asesinar y desaparecer personas, de acuerdo con lo que sobre el caso que lo llevó a prisión en Pacho Viejo, se había publicado en algunos medios de información.
Ahora, es claro que todo lo que se dijo entonces, fue parte de un linchamiento mediático, ya que los verdaderos cargos que se le atribuyen, son los de haber ordenado que se alterara una escena del crimen, en términos del artículo 318 Quinquies inciso a) del Código Penal Vigente en el Estado de Veracruz.
Dicho precepto dice: “Se sancionará, a quien sin ser autor o partícipe del delito de Desaparición Forzada, incurra en alguna de las conductas relacionadas con este delito, conforme a lo siguiente: a) Ayude a eludir la aplicación de la justicia o a entorpecer la investigación de cualquiera de los delitos de desaparición forzada de personas o su equiparado, con pena de cinco a diez años de prisión y multa de doscientos a mil días de salario”.
De ningún modo se puede afirmar que el supuesto antes mencionado no deba ser sancionado, o que sea de poca importancia. Luis Ángel Bravo Contreras debe hacer frente a las acusaciones que han hecho en su contra, pero no puede la sociedad mantenerse en la falsa creencia de que haya ordenado detener, asesinar y desaparecer personas como lo han dado a conocer sesgadamente diversos medios de comunicación.
Incluso, el delito que se le imputa ni siquiera amerita que enfrente el proceso preso. De acuerdo al artículo 19 de la Constitución Federal segundo párrafo, debería permitírsele enfrentar en libertad el proceso. A lo anterior, se suma el hecho de que según lo ilustra la orden de aprehensión girada en su contra, durante más de dos años no existió señalamiento alguno en su contra, y fue hasta el 10 de mayo de 2018 cuando un ex colaborador de quien fuera Fiscal General del Estado señaló haber cometido actos irregulares por instrucción de Luis Ángel Bravo Contreras.
El ex colaborador de Luis Ángel Bravo Contreras está preso por el mismo caso, pero se tiene conocimiento de que días previos al 10 de Mayo de 2018, declaró ante el Tribunal que lleva su proceso, que jamás recibió instrucciones del Ex fiscal General, además de que negó haber cometido delito alguno con relación a ese caso.
El 11 de mayo de 2018 se emitió la orden de aprehensión contra Luis Ángel Bravo Contreras, y el 12 de Mayo de 2018, apenas un día después, el Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares lo declaró prófugo de la Justicia, ofreciendo 5 millones de pesos de recompensa a quien aportara datos que llevaran a su captura.
Todos estos elementos generan una fundada sospecha de que todo el espectáculo mediático en torno al caso de ex fiscal General, haya sido con el ánimo de ganar simpatías frente a la sociedad en víspera de las elecciones del 1 de Julio pasado.
Hoy vemos que de nada sirvió, pues ni el tema de Bravo Contreras, ni el anuncio de la Orden de Aprehensión contra la ex Primera Dama del Estado Karime Macías Tubilla, ni la publicación de la orden de aprehensión contra Javier Duarte por desaparición forzada, lograron convencer al electorado veracruzano para sufragar en favor del partido en el poder. Por el contrario, los resultados evidencian que disgustó, pues el entonces candidato Cuitláhuac García Jiménez superó con claridad al hijo del Gobernador en turno.
Será interesante el giro que pueda dar el cuestionable caso que se sigue en Pacho Viejo, y que mantiene al ex fiscal Bravo Contreras dentro de esos muros.
