Río Blanco.- Hasta en un 70 por ciento se desplomaron las ventas del 2 de noviembre debido a la crisis económica que impera a nivel nacional, afirmaron comerciantes de la feria tradicional de Todos Santos que se instaló en el municipio.
Lo grave del caso, indicaron es que no sólo el ramo de artesanías, dulces, porcelana y juguetes fueron los afectados, sino la de todos los vendedores, desde comida, ropa, souvenirs, platería y otros giros que este año buscaron acomodo en el tianguis.
Lidia Bermúdez, comerciante de juguetes y otras artesanías, manifestó que tristemente las ventas se fueron a la baja por el mal tiempo que les tocó y por el poco dinero que manejan las familias.
“Las lluvias nos pegaron demasiado, sobre todo el 1 y 2 de noviembre, que se supone serían los días principales de venta y en los cuales, la gente sólo entró, pero no compró nada”, dijo la comerciante.
Afirmó que las ventas diarias, al menos en este negocio, fueron de entre 200 y 300 pesos, no hubo mucha ganancia ni siquiera en las fechas más importantes.
Celia Lucas, vendedora de tazas, jarrones y otros productos elaborados con barro y porcelana, comentó que la Feria de Todos Santos no generó las ganancias esperadas, por lo que incluso podrían adelantar su partida, programada para el 10 de noviembre.
“Hubo sólo poquitas ganancias, hay personas que les fue bien, pero no a todos, nosotros traemos los jarros de barro elaborados en San Miguel de Quiroga, Michoacán, por lo que los gastos son mayores a las ganancias que tenemos”, manifestó.
NoÈ Carrillo
El Buen Tono